La fiebre por las explosiones para celebrar la independencia de Estados Unidos, este 4 de julio, ha provocado al menos dos casos de amputaciones de extremidades en la Ciudad de Nueva York en horas previas, provocadas por explosivos mal manejados.
Víctima inocente resultó el joven universitario Connor Golden, residente de Virginia, y quien junto a dos amigos visitaba la Ciudad de Nueva York este fin de semana. A sus 18 años, el domingo escalaba algunas rocas en Central Park, Manhattan, cuando pisó lo que las autoridades calificaron como un “experimento pirotécnico casero”.
Mark Torre, jefe de la unidad antiexplosivos del Departamento de la Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD), explicó que el paquete “no estaba construido específicamente con la intención de herir a alguien”.
No tenía pólvora y tampoco estaba preparado para activarse al momento de hacer contacto con alguien, detalló. Alguien lo preparó y al ver que no le funcionaba lo dejó allí abandonado, sin tomar en consideración el daño que podría hacerle a otra persona.
Producto de la explosión, el pie izquierdo de Golden quedó mutilado. El joven estudiante de ingeniería musical en la Universidad de Miami fue operado de inmediato y se reportó que permanece en condición estable en el hospital Bellevue en Manhattan.
De otra parte, la madrugada del lunes, una mujer de 42 años tuvo que ser auxiliada en Brooklyn, cuando intentando encender un cohete para celebrar desde el amanecer el 4 julio, algo salió mal y le quemó una mano.
Según el reporte del NYPD, la mujer, que no fue identificada, fue rescatada a las 4:55 de la mañana, cerca de la avenida Brooklyn con la Church, en la zona de East Flatbush.
De acuerdo el reporte preliminar del cuerpo de Bomberos, al menos dos dedos de la mano de la dama estarían comprometidos, por lo que los médicos del hospital Bellevue tendrían que ver cómo salvarlos de una amputación.
Fuente: Univisión