Dos años después, el astro del club Barcelona busca remontar de esa decepcionante actuación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Si bien el torneo de futbol olímpico no tiene la misma importancia de un mundial, los juegos de Río tienen un significado especial para el delantero brasileño. Neymar será una de las máximas estrellas del balompié en el evento y asumirá la responsabilidad de guiar al pentacampeón mundial a su primera medalla de oro olímpica.
Neymar prefirió participar en los Juegos Olímpicos que en la Copa América Centenario con Brasil. Todos los ojos apuntan al jugador de 24 años, que prefirió participar en las olimpiadas que en la Copa América Centenario que recién se llevó a cabo en Estados Unidos. Brasil fue eliminado en la fase de grupos de ese torneo, un resultado que generó el despido del técnico Dunga.
Debido a que no se trata de un torneo oficial de la Federación Internacional de Fútbol Asociación, los equipos no están obligados a ceder a los jugadores para las olimpiadas, pero Neymar y la confederación brasileña de futbol negociaron con el Barsa para que el delantero pudiera jugar en Río.
Será la segunda ocasión en que Neymar juegue por Brasil en los olímpicos. El delantero lideró al equipo que perdió la final de 2012 ante México en Londres, donde los brasileños eran amplios favoritos. Brasil había sido subcampeón dos veces anteriores, en 1984 y 1988. También se colgó el bronce en 1996 y 2008, la última vez con un equipo que contó con Ronaldinho y futuras estrellas como Marcelo y Thiago Silva.
Neymar será uno de los tres jugadores mayores de 23 años que Brasil, al igual que cualquier otra selección, puede convocar para sus equipos olímpicos. Los otros dos en la escuadra brasileña son el portero del Palmeiras, Fernando Prass, de 38 años, y el mediocampista de 28 años del Beijing Guoan, Renato Augusto, ambos con mucho menos experiencia internacional que Neymar.
Brasil tuvo un sorteo favorable y se medirá ante Sudáfrica, Irak y Dinamarca en el Grupo A, y debutará el 4 de agosto ante los sudafricanos en Brasilia. En cuartos de final, los anfitriones podrían enfrentar a Colombia o Nigeria, dos potencias a este nivel. La final se realizará el 20 de agosto en el estadio Maracaná de Río.
Fuente: Despertardeoaxaca