La investigación sobre el violento choque frontal de dos trenes de pasajeros en el sur de Italia en el que fallecieron un total de 23 personas, tendrá en cuenta mejoras ferroviarias que se habían demorado y el anticuado sistema telefónico de alertas, según indicaron las autoridades.
Equipos de rescatistas emplean una grúa de grandes dimensiones y perros de búsqueda durante sus operaciones, que continuaron durante la noche y madrugada del miércoles, para retirar los restos de los dos convoyes que impactaron poco antes del mediodía del martes en un campo de olivos entre las localidades de Andria y Corato, en la región de Puglia.
Fuente: La Razón