Un equipo de científicos del CINESTAV (Centro de Investigación y Estudios Avanzados del IPN) buceaba cerca del muelle de cruceros de Puerta Maya el 4 de abril de 1997 realizando un chequeo de los corales que habían trasplantado por motivo de la construcción del muelle de cruceros en Cozumel, cuando escucharon un estruendo muy cerca de ellos. El sonido viaja más rápido en el agua, lo que dificulta conocer de dónde viene y qué lo produce. La onda de choque fue espeluznante y la sintieron en sus cuerpos como percibían el cambio de la marea.
El barco de cruceros Majestic of the Seas de 268 mt. de largo, 32 de ancho y 8.5 de calado, con un peso de 74 mil ton y capacidad para 2,744 pasajeros (solo traía 1,500), chocó contra el duque de alba (pilote que alarga la zona de atraque y asegurar los buques ofreciendo apoyo lateral). Cuatro años antes los Pilotos del Puerto habían enviado un telegrama urgente al presidente Salinas informando que un estudio técnico decía que para evitar las fuertes corrientes en la zona, que habían motivado el concurso para la construcción de un muelle debido al impacto de frente de otro crucero en el muelle contiguo SSA Internacional, el muelle nuevo debería estar a una distancia de 500 mts.
El proceso de evaluación del Impacto Ambiental había sido muy difícil debido a que tres grupos ambientalistas: el CEMDA, el Grupo de los 100 y el Comité para la Protección de los Recursos Naturales, habían objetado el proceso y al no recibir una respuesta adecuada a sus demandas por parte de la autoridad ambiental mexicana presentaron el caso, que fue el pionero en esta materia, ante la Comisión para la Cooperación Ambiental, CCA que surgió por la firma del Tratado de Libre Comercio entre EU, Canadá y nuestro país. El presidente de la CCA en aquellos momentos era Víctor Lichtinger que fue posteriormente secretario de SEMARNAT con Fox.
Se argüía además de ilegalidad en el procedimiento, afectación al popular arrecife de Paraíso. Así debido a esto el muelle fue movido en la autorización del INE a 350 mt. del anterior. Al edificar el duque de alba la distancia se redujo a 250, mt. Hoy día la autorización de una ampliación del muelle deja a los barcos a 120 mt. de distancia y a escasos 30 en las maniobras del arrecife. Un lugar visitado por un promedio de 400 buzos al día. El accidente fue tan solo un “recargón” a decir de los directivos de la empresa de cruceros.
En abril del 2005 unos buzos norteamericanos buceaban tranquilamente en el popular arrecife Paraíso en la isla de las golondrinas a unos 40 ft. de profundidad cuando una fuerte corriente los arrastró con un remolino de arena y los botó unos 50 pies en sentido opuesto a la corriente. Algunos perdieron las máscaras y parte del equipo de buceo. El arrecife, la tercera “cordillera” de Paraíso quedó totalmente enterrada en la arena y los submarinistas aterrado
Un crucero que estaba varado al garete debido a la saturación de los puntos de atraque, 7 en ese momento y había 10 cruceros en el Puerto, fue empujado por una fuerte turbonada hacia tierra y para evitar la colisión el capitán ordenó encender las propelas principales que produjeron el levantamiento de arena que aterró a los buceadores y enterró esa formación de arrecife.
La naviera fue multada y se reparó el daño al arrecife limpiando la arena con un eficiente equipo que vino al día siguiente de la universidad de Miami. “Es un peligroso escenario para el tráfico marino, urgen medidas de seguridad para evitar nuevos “sustos”, decía el texto enviado al presidente Salinas. Tras ello los pilotos de puerto en Cozumel terminaron atracando (estacionando) los cruceros y asunto arreglado.
El 25 de octubre del 2009 el crucero Carnival Legend partía a las 6 de la tarde y en un cambio brusco de clima como sucede comúnmente en Cozumel, una turbonada lo aventó contra el Enchantment of the Seas que aún estaba amarado y salía una hora más tarde. Este último crucero tuvo que permanecer en el puerto toda la noche hasta que repararon los daños y que fuera seguro para la navegación.
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En la parte ambiental el conflicto no ha sido resuelto tan fácilmente. Sin embargo a partir de este proceso con el CCA resultaron dos fondos administrados por CEMDA para la elaboración del POET y del PNAC. Fue el comienzo de las bases para el relanzamiento de la política ambiental de nuestro país con la presencia de la Secretaria Julia Carabias Lillo en Cozumel el día del decreto el 19 de Julio de 1996.
El viernes pasado se celebró el cumpleaños 20 del PNAC con un par de conferencias: Los 20 Años del PNAC y La Salud del Arrecife Mesoamericano, caso particular Cozumel, México; y un brindis con bocadillos al finalizar. También la entrega de reconocimientos a quienes han constituido el Consejo Asesor y a dos integrantes del equipo que llevan trabajando en el ANP durante estos 20 años, Rosalinda García Márquez en educación ambiental y a Doña Mary en la administración del PM.
Se han atendido el 100% de las escuelas de la isla en educación ambiental. Un logro de Rosy y su equipo al que hemos contribuido. El programa Embajadores del Arrecife de Ocean Futures Society de Jean Michel Cousteau, OFS a quien representamos en Yucatán, ha trabajado asociado con el PNAC y hemos atendido a 1,200 niños en dos años.
Un día antes del aniversario se presentó un estudio de capacidad de carga del arrecife. Estos dos estudios de capacidad de carga y de salud del arrecife (los indicadores: cobertura y peces asociados como loras, pargos y meros) son muy importantes para determinar el uso sustentable de nuestro más preciada recurso, el arrecife coralino en Cozumel.
Hay buenas y malas noticias pero sobre todo si algo debemos enfatizar en estos últimos 10 años del PNAC es la participación de la comunidad en la conservación del recurso. Se quedó muy claro que la ley y sus reglamentos se cumplen por consenso. Eso hace que vivamos en sana armonía. Si todos nos pasáramos un alto o decidiéramos robar no habría policía suficiente para contenernos. No lo hacemos porque entendemos que no es correcto hacerlo para la paz y el respeto al derecho ajeno.
La capacidad de carga del arrecife en Cozumel está rebasada, aunque por fortuna los permisos están en un nivel constante en estos 20 años. Son 2,500 personas al día en 30 arrecifes. Siempre hemos sostenido que las buenas prácticas ambientales aumentan la capacidad de carga, pero hay un alto recambio de prestadores de servicios y guías turísticos. Aún persisten los guías que por ganarse una propina les dan pan o tortillas a los peces para atraerlos. Esto causa que los peces no coman las algas y estas aumenten en número y compitan con el coral.
En cuanto a la cobertura, debido a los huracanes Emily y Wilma en 2005 perdimos el 80%. Quedamos en un 5%. Se manejó la imagen que el arrecife era un paciente en cuidados intensivos y como tal había que tratarlo. Se fue recuperando en estos 11 años gracias a la cooperación de los prestadores de servicios y la comunidad. La cobertura aumentó hasta 35% en 2013. Después cayó a 23% en 2015. La hipótesis el efecto del fenómeno del niño. Que podríamos no descartarla. Pero también están las algas y la eutrofización.
En 2011 que vino a Jean Michel Cousteau a Cozumel para filmar The Current y lo conectamos con el Scuba Fest, me advirtió: hay muchas algas en el arrecife. Son indicadoras de que algo no está bien. No había buceado en Cozumel desde la construcción de Puerta Maya en 1996. En aquella ocasión nos vino a apoyar para evitar la construcción de Puerta Maya sobre Paraíso.
Estuvo estos días buceando en Cozumel la Dra. Laura Calva del laboratorio de Ecosistemas Costeros del departamento de Hidrobiología de la UAM, especialista en contaminación y en la relación de sedimentos con organismos. Es decir, puede relacionar la presencia de organismos como ciertas clases de algas con contaminación por exceso de nutrientes (eutrofización) o por la presencia de hidrocarburos que vienen de las lanchas y los cruceros.
El trabajo de OFS, tiene como objeto entre otras cosas poner en contacto a las personas para lograr la conservación de nuestro medio ambiente. Así que en una agradable reunión de trabajo pusimos en contacto a la dirección del PNAC con la investigadora a fin de establecer una línea de investigación para dar elementos al PNAC para la toma de decisiones en el manejo atinado del ANP. Felicidades al “Parque Marino” y a quienes a lo largo de 20 años hemos contribuido para su importante trabajo en favor de nuestro arrecife.
Fotos Benny Campos y Carlos Rico.