El panorama se ve complicado, y no por la salida repentina de la selección mexicana de Gustavo Ayón, sino por el nivel al que se enfrentará México, y más que nada porque jugarán ante algunos europeos y en calidad de visitantes.
Los favoritos son los italianos, pues a pesar de no estar tan bien situados en el ranking de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA), llevan una quinteta sólida y con una calidad de la National Basketball Association (NBA).
Tienen en su roster a Marco Belinelli, Danilo Gallinari y Andrea Bargnani, triplete que podría arrasar en la primera justa del grupo B, el contrario a México, pero con los que se podría enfrentar en caso de avanzar.
El gran problema para el Tricolor es que lleva más de 40 años que no le gana a un europeo en juego oficial, y para soñar con Brasil se le deberá pegar por lo menos a dos o tres para alcanzar el único boleto para tierras sudamericanas.
En el interior del equipo saben que la Selección no es un jugador, sino un equipo, algo que los ha llevado a tener grandes resultados en los últimos años, como haberse colgado el oro en el premundial de Venezuela en 2013, donde se ganó el pase al mundial, tras cuatro décadas sin hacerlo.
Muchos apuntan que el sueño olímpico lo tuvo México hace casi un año, cuando recibió en la capital el preolímpico continental, pues tenían al público de su lado y un equipo liderado por Ayón.
Para su desgracia los resultados no se dieron y sólo se consiguió el pase el repechaje, que incluso, estuvo en peligro de perderse hace unos meses por problemas federativos.
Fuente: Despertar de Oaxaca