La Procuraduría General de la República (PGR) parece navegar en dos aguas pues con los padres de los 43 normalistas desaparecidos muestra disposición y voluntad para analizar las nuevas líneas de investigación sobre este caso sugeridas por los expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Sin embargo, mediáticamente parece que insiste en mantener la versión de que los jóvenes fueron incinerados en el basurero de Cocula, versión que rechazan las familias.
Informó lo anterior el abogado de los padres y madres de los estudiantes, Vidulfo Rosales, quien precisó que ayer la titular de la PGR les entregó el libro blanco del caso y en él se empieza a perfilar el móvil de los hechos ocurridos la noche del 26 de septiembre en Iguala, Guerrero y que podría ser la toma violenta de los camiones por parte de los normalistas, versión en la cual también difieren.
Entrevistado por Ciro Gómez Leyva dijo que están analizando el contenido del libro blanco y a unas horas de haberlo recibido se han percatado de que se trata de un recuento de las diligencias y va perfilando el móvil, lo cual debe ser replanteado porque consideran que la PGR tiene que trabajar más en las indagatorias para encontrar el verdadero motivo de la agresión a los jóvenes.
Por otro lado, en la reunión de ayer les informaron del relevo a la titular de Servicios Periciales de la PGR, Sara Mónica Martínez y que en una o dos semanas se dará a conocer el destino de Tomás Zerón de Lucio quien es titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la PGR de quien ya existe un dictamen pero que deberá ser aprobado entre esta y la próxima semana.
Fuente: Radio Fórmula