La medida fue tomada después que se identificara la presencia de un paquete sospechoso en el área donde opera la compañía Eurostar, que conecta Bruselas a Londres, explicó la compañía belga de trenes SNCB.
La policía envió al local a sus expertos en explosivos, que descartaron cualquier riesgo y autorizaron a los pasajeros a volver a los andenes, mientras que se restablecía el tráfico ferroviario.
El suceso provocó retrasos en los trenes con destino y origen en Londres.
Fuente: Crónica