El presidente de Cuba, Raúl Castro, ratificó hoy su «firme e incondicional solidaridad» con Venezuela y Nicolás Maduro, así como con la presidenta brasileña suspendida, Dilma Rousseff, en la apertura de la reunión presidencial de la VII Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe (AEC).
Castro reafirmó el apoyo hacia «el Gobierno legítimo del presidente Nicolás Maduro y con la Revolución Bolivariana», que «enfrentan con firmeza la embestida desestabilizadora y la guerra económica y mediática de quienes pretenden barrer las conquistas políticas, sociales y económicas que han beneficiado a millones».
Para el mandatario de la isla, que ostenta la presidencia temporal de la AEC, es motivo de profunda preocupación el inaceptable intento del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, por aplicar la llamada Carta Democrática Interamericana para intervenir en los asuntos internos de Venezuela.
El mandatario cubano también expresó su solidaridad con Brasil y su «presidenta constitucional Dilma Rousseff, que enfrenta valientemente un golpe de Estado parlamentario promovido por derecha oligárquica y neoliberal para revertir las conquistas sociales alcanzadas durante los Gobiernos del Partido de los Trabajadores».
Fuente: La Razón