La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó «enérgicamente» la violencia registrada en Oaxaca, que dejó saldo de ocho muertos, e instó al Gobierno a promover «un proceso de diálogo»en el marco de la reforma educativa en México.
Por ello, dio la bienvenida al anuncio del establecimiento de una «mesa de diálogo» entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y el Gobierno mexicano.
Recordó la obligación del Estado mexicano «de impulsar una investigación diligente sobre los hechos y sancionar, de acuerdo a la ley, a las personas que puedan resultar responsables de estas muertes y otros hechos de violencia».
Además de los ocho fallecidos, las autoridades informaron que hubo 41 policías federales heridos, 14 policías estatales heridos, y 53 civiles lesionados.
Fuente: Excélsior