El organismo de investigación del cáncer de la Organización Mundial de la Salud sí planteó mayores preocupaciones acerca del consumo de bebidas calientes, pero dijo que no hay evidencia de que estas dos bebidas puedan causar cáncer.
Es un buen día para los bebedores de café y el sector global de 77 mil millones de dólares que lo mantiene enganchado.
La máxima autoridad mundial en el tema del riesgo de cáncer declaró este miércoles que no existe evidencia que vincule el consumo de café a un mayor riesgo de cáncer.
Pero no se adelante, porque el organismo de investigación del cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sí planteó mayores preocupaciones acerca del consumo de bebidas calientes. Existe evidencia limitada de que las bebidas a temperatura superior a 65 grados centígrados probablemente suponen un cierto riesgo de cáncer.
La organización advierte que los líquidos muy calientes pueden ser «probablemente cancerígenos» para los seres humanos, sobre la base de análisis tanto en investigación humana como animal.
El café y otras bebidas calientes se sirven normalmente a 71 grados centígrados o más, según un estudio realizado en 2008 por la revista Burns. Eso es lo suficientemente caliente como para escaldar.
La buena noticia: la mayoría de la gente en general prefiere beber su café o té a alrededor de 60 grados, lo que está por debajo de la zona de peligro potencial.
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC en inglés) de la OMS está evaluando constantemente los peligros asociados con cosas con las que nos encontramos diariamente, desde misteriosos químicos hasta la luz solar y el café.
El pasado octubre, el organismo dijo que la carne procesada causa cáncer, y que la tradicional y simple carne roja probablemente también lo haga.
Vale la pena observar que el hecho de que la OMS no encontró ninguna evidencia no significa que no haya alguna que vincule el café con el cáncer. La sentencia oficial es que el café es «no clasificable » con respecto al cáncer. La popular bebida de América del Sur, el mate, se clasificó de manera similar cuando no se consume muy caliente.
También es importante tomar en cuenta que sólo porque algo se considera cancerígeno no quiere decir que sea tan peligroso como, por ejemplo, el tabaquismo.
Los riesgos vinculados con el consumo de carne son un buen ejemplo de esto. Los científicos convocados por la IARC estiman que un consumo diario de 50 gramos de carne procesada (un par de fetas de tocino) aumenta el riesgo de cáncer de colon en un 18 por ciento.
Esto puede parecer aterrador, pero hay que tener en cuenta que menos de una de cada 20 personas nunca serán diagnosticadas con este cáncer en su vida, y muchas de ellas reciben esa mala noticia en la vejez.
El mismo tipo de dinámica que está en juego con el riesgo de bebidas calientes. «Todo lo que uno puede tomar de estas cosas son sólo sugerencias», dijo Otis Brawley, director médico de la American Cancer Society.
Brawley dijo que no hay nada en el informe nuevo que debiera hacer que las personas cambien sus hábitos de comer o beber. Y si bien la ciencia sobre el café y bebidas calientes es importante, no debe distraer la atención de los comportamientos que realmente representan un riesgo para la salud.
El tabaquismo es, por supuesto, el que presenta el riesgo más grande de todos. Ser fumador es equivalente a agregarle de 5 a 10 años más a su edad actual, un análisis reveló. En cuanto al riesgo potencial de bebidas calientes, Brawley dijo que la solución es simple. «Si alguien está preocupado por ello, que deje que la bebida se enfríe un poco antes».
Fuente: El Financiero