El reconocimiento que hizo Rosales sobre que los estudiantes fueron secuestrados y asesinados —como lo apuntó las investigaciones de la Procuraduría General de la República (PGR)— causó división con los padres de los estudiantes.
En entrevista, Emiliano Navarrete, padre de uno de los normalistas desparecidos, recaló que está en desacuerdo con Rosales, por lo que hablará con él para aclarar las cosas.
“Me sorprende que diga eso. ¿Cómo que acepta (la muerte de los normalistas)? Nosotros traemos diferentes teorías, verdad. Yo voy a hablar con él de eso. ¿Por qué lo dijo, si algo sabe, por qué hasta ahora lo dice? Yo no me voy a lo que dice el licenciado. No sé en qué forma lo dijo. Lo aclararemos de frente mañana que él esté aquí (en Guerrero)”, dijo en referencia a si mantendrán a Rosales como su abogado.
El padre de José Ángel Navarrete dijo no estar de acuerdo con que los normalistas están muertos, pues “no, no existen evidencias. No entiendo por qué dijo eso”.
Por su parte, Epifanio Álvarez Carvajal también rechazó lo dicho por Rosales. Afirmó que su hijo Jorge está vivo, ya que para aseverar lo contrario “debe haber pruebas de aquí están los cuerpos, o con ADN para asegurar que son ellos”.
Explicó que hoy tendrán una reunión en la escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, en la cual, dijo, aprovechará para hablar del tema.
Al explicar el origen de una conversación telefónica que sostuvo Vidulfo Rosales con uno de los padres de los normalistas, Mario César González, sobre una presunta amenaza del grupo criminal Guerrero Unidos, porque éstos les dieron 200 mil pesos —que aún no habrían sido repartidos entre todos los progenitores, como acordaron—, el abogado dijo que sería imposible que tuvieran nexos con quienes asesinaron a los estudiantes.
Fuente: La Razón