Seis de las principales terminales aéreas de Alemania paralizaron sus servicios por una disputa salarial entre los trabajadores y el gobierno, que afectó a miles de viajeros en sus desplazamientos.
El paro de labores obligó a la aerolínea alemana Lufthansa a cancelar cerca de 900 vuelos, por lo que unos 87 mil pasajeros se verían afectados. Otras compañías aéreas también se han visto obligadas a suprimir o retrasar algunas de sus conexiones previstas.
En el aeropuerto de Múnich, donde la huelga se prolonga todo el día, se suprimieron 700 conexiones de un total de mil 100.
El sindicato de empleados públicos y de servicios Verdi convocó al personal de servicios de transporte de tierra (responsables del manejo de equipaje, de controles de seguridad y bomberos) a secundar una huelga para exigir un aumento del 6 por ciento de su salario.
Fuente: La Razón