Hay que dedicarle más atención a las horas de sueño. Realmente luego de una agotadora jornada de trabajo, se necesita que esas horas de descanso sean lo más relajantes. Si no se adquiere buenos hábitos a la hora de dormir, el resto del día nos encontraremos cansados, con dolor de cabeza, y no se rendirá lo necesario en el trabajo.
Los especialistas recomiendan beber al menos un litro y medio de agua por día; una cantidad permite mantenerse en forma y bien hidratada. Las consecuencias de la falta de hidratación son: mala concentración, propensión a las infecciones y dolores de cabeza.
Varios estudios demuestran que la sal de mesa es bastante mala para las arterias si se la consume en grandes cantidades. Si se come fuera de casa, procurar alejar el salero de la mesa, y recordar que generalmente la comida ya viene preparada con sal. Si se cocina en casa, reducir al máximo posible la cantidad de sal.
Es muy común sentarse con las piernas cruzadas, en especial las mujeres; sin embargo, las piernas cruzadas dificultan la circulación sanguínea al comprimir arterias y venas lo que aumenta la sensación de pesadez que padecen muchas mujeres. Además, las piernas cruzadas pueden llevar a una mala postura y provocar dolores de espalda.
Fuente: 20Minutos