Por eso desde la escudería energética se reitera que el panorama del campeonato debe cambiar. «Somos mejores que para ser meramente escuderos. La F-1 no es el Tour de Francia. Si no somos competitivos desde el punto de vista del motor, dejaremos el Mundial», afirma Dietrich Mateschitz, el jefe de la marca.
El austríaco ofrece esa declaración de intenciones apenas a una semana de que el Mundial 2016 arranque en el circuito australiano de Albert Park. «De ninguna manera queremos pasarnos los próximos cinco años luchando por la quinta posición», añade Mateschitz en Speedweek. El equipo ha vuelto a apostar por Daniel Ricciardo y Daniil Kvyat para tratar de recuperar el peso que tenía hace unos años.
Lo cierto es que el escenario ha cambiado, Mercedes ejerce ahora el dominio incontestable que hace nada protagonizaba Red Bull con Sebastian Vettel de piloto estrella. «Queremos ocupar el tercer lugar, sólo por detrás de dos fabricantes como Mercedes y Ferrari. Nuestro nuevo monoplaza es uno de los mejores que hemos construido, su rendimiento es muy bueno. En resumen, es una nueva obra maestra de Adrian (Newey) y del equipo técnico», comenta el máximo responsable de Red Bull, que sentencia: «El poder de Mercedes y Ferrari es malo para la Fórmula 1».
Fuente: Motor.as