Como siempre estas semanas de tests, McLaren colocaba a su piloto, hoy Fernando Alonso, el primero de la fila cuando el semáforo se convertía en protagonista por volverse verde a las nueve horas. El #14 empezó con una tanda de ocho vueltas con neumáticos experimentales y tiempos relativamente buenos. Después de un breve descanso, una tanda con medios de seis vueltas y similares cronos.
Dos tandas con goma blanda y un tiempo que se quedó en aceptable, después de cinco y tres vueltas cronometradas. Antes de llegar a la primera hora ya, los de Woking calzaron el neumático superblando, pero se quedaron a medio segundo del tiempo de Mercedes con medios.
La diferencia entre compuestos está entre 1.5 y dos segundos, con lo cual si las referencias fueran fidedignas (que no tienen por qué serlo por diferencia de programas, carga combustible…), los de Brackley están a más de dos segundos de los de Woking. Después, Alonso dio tandas cortas con medios.
Los de Stuttgart se centraron en dar tandas largas en la única sesión del día para Nico Rosberg, dado que cederá el W07 a Lewis Hamilton por la tarde. El #6 completó distancia de carrera con tiempos más que decentes con la goma blanca.
Pero la tabla de tiempos fue rápidamente dominada por Ferrari y Kimi Raikkonen, con todo tipo de neumáticos. Sin vértigo a la altura, Raikkonen marcó un impresionante 1:23.009 con goma blanda, mientras que Sebastian Vettel con ultrablando (1.5-dos segundos más rápida) un 1:22.810.
En Ferrari no pudieron mejorar con los súper blandos, pero sí lo hicieron –solo tres décimas- con el ultra blando, y así Iceman marcó el mejor tiempo absoluto de los tests, 45 milésmas por delante de Vettel. Williams tuvo muchos problemas para meter el FW37 en pista y solo lo hicieron las dos últimas horas de sesión, después de que ayer Valtteri Bottas dijese que la fiabilidad no es un problema.
Red Bull, en cambio, estuvo 24 vueltas probando pit stops con Daniil Kvyat. El ruso luego probó mini-stints con medios. Plan muy similar al de Daniel Ricciardo ayer. La sesión transcurrió sin parones por bandera roja y con la habitual falta de fiabilidad de Haas, hoy con Romain Grosjean, y con muchas vueltas por parte de Force India (Nico Hulkenberg) y Toro Rosso (Max Verstappen).
Y precisamente fue Grosjean impactando frontalmente contra el muro de la salida de la curva cuatro en los últimos dos minutos de sesión el que provocó la única bandera roja del día. Para nada buenas noticias para Haas.
Fuente Car & Driver F1