Pese al frío y la lluvia, miles de familias participaron con flores y velas en el homenaje en distintos puntos del noreste del país, azotado por el desastre.
A las 14 horas 46 (05 horas 46 GMT) se observó un minuto de silencio en todo Japón, en el momento preciso en que hace cinco años se produjo un sismo de magnitud 9 frente a la isla principal de Honshu.
En la región en la que se produjeron más muertos, en Sendai, los supervivientes se concentraron ante una estatua erigida en la playa de Arama, donde hace cinco años gigantescas olas barrieron todo a su paso.
El emperador Akihito, la emperatriz Michiko, el primer ministro Shinzo Abe y otros participantes en la ceremonia de Tokio inclinaron sus cabezas en señal de homenaje.
Fuente: La Jornada