Estar enamorado es un sentimiento adictivo. Sentir esas mariposas en el estómago, suspirar constantemente por esa persona especial y demás, hace que te sientas contento y que tus días tengan otro sentido.
Según la Fundación Española del Corazón (FEC), estar enamorado es muy importante para nuestra salud cardiovascular y por enamorados no sólo nos referimos a un sentimiento de pareja, sino también familiar.
El enamoramiento forma parte de un proceso bioquímico que comienza en el cerebro, donde se activan las zonas encargadas de segregar hormonas como la oxitocina, la dopamina o la adrenalina. Estas sustancias actúan como protectoras del sistema cardiovascular, por lo que ayudan a que nuestro corazón bombee con fuerza y se mantenga ejercitado.
Fortalecer la presencia de sentimientos positivos, te ayudará a prevenir enfermedades cardiovasculares y desde luego, mejorar tu estado de ánimo. Pero no sólo eso, la liberación de las hormonas mencionadas anteriormente, harán que te sientas mucho más feliz, ya que son antidepresivos naturales, lo que también hará que tu piel se vea más joven y resplandeciente, haciéndote más atractivo gracias al aumento de estrógenos.
El amor también afecta al estómago en forma positiva. Cuando sientes mariposas es porque tus más de 100 millones de células nerviosas que controlan muchas de las reacciones corporales en correspondencia con procesos psíquicos están activadas.
Pero cuidado, si tienes mal de amores, diversos estudios han revelado que este sentimiento estimula, a través de la serotonina, un síndrome ansioso-depresivo que puede provocar complicaciones en el sistema cardiovascular, lo que estrecha los vasos sanguíneos poniendo en riesgo tu salud.
Fuente: Zócalo