Una amplia selección de las especies que se consideran más peligrosas, de las cuales destacan las siguientes.
Alga asesina (Caulerpa taxifolia) Es una de las especies marinas invasoras más peligrosas. Si bien es originaria del Caribe ya se ha extendido por todo el Mediterráneo, tras ser vertida en el año 1984, por un error humano desde un acuario de Mónaco. Su toxicidad y su gran resistencia han hecho estragos en varias especies autóctonas y ha provocado la destrucción de grandes praderas submarinas, como las de posidonias, que son esenciales para el equilibrio del ecosistema mediterráneo.
Almeja asiática (Corbicula fluminea) Este bivalvo puede alcanzar los 5 centímetros y logra desplazar a las especies nativas alterando la cadena trófica natural. Además se considera muy perjudicial para las centrales hidráulicas y para todas aquellas industrias que utilizan agua, ya que se instala en las tuberías, obstruyéndolas. En 1980 ya se calculaba que el coste para controlarla en los EEUU rondaba los 1000 millones de dólares anuales. En España desde 2005 afecta de manera especial al Medio Ambiente del bajo Miño y del río Guadiana.
Cangrejo americano (Procambarus clarkii) Este crustáceo ha colonizado varios ríos españoles poniendo en grave riesgo de supervivencia al cangrejo autóctono. Del mismo modo, es perjudicial para otras especies, tales como peces y anfibios, además gracias a su hábito de “escarbar”, también ocasiona daños en los cultivos. Esta especie fue introducida en Europa a principios del siglo XX para consumo humano. A España arribó con este fin en 1974, importado por una granja situada en las marismas del bajo Guadalquivir. Por error o negligencia, este cangrejo escapó y desde ese momento su expansión ha resultado imparable.
Helecho de agua (Azolla spp.) La azolla se ha dispersado por diferentes puntos de España, especialmente en las zonas de los arrozales. Es capaz de desplazar a las diversas variedades de vegetación acuática nativa y empobrece la calidad del agua, por lo que afecta directamente al resto de biodiversidad y al Medio Ambiente donde se instala. Este helecho de agua proveniente de América del Sur, habría llegado al país de dos formas: asociado accidentalmente al cultivo de arroz y de manera intencionada ya que se suele vender como planta ornamental.
Hierba de la Pampa (Cortaderia selloana) También llamada «plumero», esta hierba se ha extendido por todo el territorio español, afectando de forma grave a la biodiversidad local y ocasionando daños medioambientales allí donde se instala. Llegó a Europa proveniente de Sudamérica a mitad del siglo XIX.
Mejillón cebra (Dreissena polymorpha) Este molusco recibe tal nombre por las rayas blancas y oscuras alternadas de su concha. Natural de los mares Caspio y Negro fue detectado por primera vez en Cataluña (en el bajo Ebro) en 2001 y se ha extendido con gran rapidez a otras comunidades. Provoca una disminución muy grave en la diversidad biológica de los ecosistemas donde se asienta y daña especialmente las construcciones hidráulicas. En los EU ya ha causado pérdidas millonarias en los últimos 10 años y en nuestro país representa una amenaza medioambiental y económica de gran consideración.
Mosquito tigre (Aedes albopictus) Debe su denominación a que posee unas características franjas blancas en el abdomen. Es originario del Sureste Asiático, su tamaño es bastante mayor que el de los mosquitos autóctonos y se ha adaptado sin problemas al Medio Ambiente local. Fue detectado primera vez en agosto de 2004 en la localidad de Sant Cugat del Vallés y desde ese momento se ha extendido por el resto de la provincia catalana. Sus picaduras son sumamente dolorosas y suelen ir acompañadas de escozor e inflamación persistentes; también puede ocasionar graves reacciones alérgicas. Se cree que el tráfico de mercancías habría propiciado su llegada.
Picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus) Este insecto es la peor de las pesadillas para las palmeras de Andalucía, Canarias, Murcia y Valencia. Es un parásito cuyos efectos en una primera instancia no son apreciables, pero que es capaz de matar a sus huéspedes de manera sistemática. Su origen está en el Sureste Asiático y en la Melanesia, donde ataca con saña a las palmeras de coco. En España se lo detectó por primera vez en las localidades granadinas de Almuñécar y Motril, a mediados de 1993. Su introducción se debió a la importación de palmeras para ornamentación que provenían del norte de África.
Tortuga de Florida (Trachemys scripta elegans) Esta tortuga americana fue puesta de moda a nivel mundial como mascota, en la década de los 80. En los 90 arribó a España y siguió importándoselas hasta 1997. Hasta que la UE prohibió su importación, se calcula que se vendieron más de un millón de estos ejemplares. De manera negligente, esta especie fue soltada y se ha reproducido de forma incontrolada ocasionando la exclusión de los galápagos nativos, depredando peces, invertebrados y anfibios, consumiendo la vegetación acuática y dañando el Medio Ambiente y los ecosistemas locales. Además, al ser capaz de transmitir la salmonelosis supone un peligro sanitario.
Visón americano (Mustela vison) En 1958 llegaron los primeros ejemplares a una granja ubicada en Segovia, con el fin de aprovechar su preciada piel. Desde ese momento ha habido infinidad de fugas (voluntarias o por negligencia) que han propiciado la expansión de los visones por una parte importante del país. Es de mayor tamaño y más agresivo que el visón europeo, por lo que lo combate para obtener sus territorios, poniendo a los autóctonos en grave peligro de extinción. En muchas comunidades se han puesto en marcha sendos programas de recuperación del visón europeo, con el fin de salvar a la especie nativa.
Fuente: Econoticias