La expansión del virus zika en el continente americano, así como su asociación con microcefalia en bebés y casos de síndrome de Guillain-Barré implican grandes retos en materia de salud pública a nivel mundial, pues en caso de demostrarse una relación causal sería necesario replantear la estrategia que hasta hoy se ha seguido para contenerla.
Así lo expuso la investigadora Rosa María del Ángel Núñez de Cáceres, del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), durante el coloquio “Verdades, mentiras e incógnitas sobre el Zika”, realizado en el marco de la celebración del 55 Aniversario de la institución.
La titular del Departamento de Infectómica y Patogénesis Molecular del Cinvestav señaló que si no se comprueba dicha asociación, que ha sido expuesta en varios estudios recientes, podríamos hablar del zika como una enfermedad febril leve que sólo provoca síntomas en una de cada cuatro personas infectadas.
Pero en caso contrario, advirtió, sería necesario que las autoridades y organismos de salud adopten una nueva estrategia, diferente a la que han empleado contra el dengue –que también es transmitido por mosquitos vectores del género Aedes– para hacerle frente.
Dijo que el virus del zika es capaz de atravesar la placenta, llegar al sistema nervioso y ocasionar una enfermedad que puede tener todos los cuadros clínicos, desde la muerte del bebé recién nacido hasta retraso mental o motriz.
También es preciso –aseguró– desarrollar métodos de diagnóstico en la fase de convalecencia, controlar a los mosquitos transmisores, además de determinar si hay reservorios del zika, pues aun cuando se proteja a la población humana o se reduzca la cantidad de esos insectos, es probable que el virus surja otra vez.
Consideró que desarrollar una vacuna tomará muchos años, como sucedió con la del dengue. Ante esto y la falta de tratamientos específicos, sugirió que las personas que ya lo han contraído se mantengan en reposo, beban líquidos en abundancia y tomen paracetamol.
Para prevenirlo es necesario usar en lugares de riesgo, manga larga, pantalón, protector contra mosquitos, fumigar, pero sobre todo evitar en casas o cerca de ellas la formación de charcos ya que en ellos se reproducen los mosquitos.
Fuente: Omnia