La policía del Capitolio dijo que la situación era segura menos de una hora después de que se informara sobre los paquetes sospechosos, hallados afuera del centro de visitas y cerca de la Biblioteca del Congreso, que se ubica frente al edificio.
Durante la breve investigación, una de las entradas al centro de visitas fue cerrada, pero la otra, así como el edificio del Congreso y las oficinas que lo rodean, permaneció abierta, según un comunicado de la policía.