Pero no es así, que tu coche dé problemas porque, consciente o inconscientemente, la marca ha cometido un error en el proceso de montaje también te puede pasar a ti. Es más, puede que sea la razón por la que cada poco tiempo tienes que pasar por el taller para ajustar esa pieza que, por razones que nadie te sabe aclarar, se desajuste más de lo debido.
Cuando se habla de defecto de fabricación en un coche es importante distinguir dos categorías; de que te encuentres en una u otra dependerán los pasos a seguir.
– Defecto que afecta a un grupo masivo de unidades. Son los que afectan a miles, incluso millones de unidades. En la mayor parte de los casos nos enteramos de ellos por los medios de comunicación que se hacen eco de la llamada a revisión que lanzan los fabricantes.
Digo, “en la mayor parte de los casos”, porque puede suceder también que el problema no sea lo suficientemente grave como para justificar la alerta a los conductores y los fabricantes lo solucionan, sin que el propietario lo sepa, cuando el coche pasa por el taller para pasar las revisiones oficiales.
– Defectos excepcionales que afectan a uno o varios coches.
Hoy nos vamos a centrar en esos casos en los que, sin haber cumplido un año (o un poco después), el vehículo entra en una espiral de averías que parece no tener fin; pero nadie, desde el fabricante, parece conocer la causa.
La antigüedad del coche, la clave
Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA) nos recuerda que todo coche tiene una garantía legal de dos años. En ese tiempo, el fabricante está obligado a tratar de reparar todas las averías que se produzcan. Ahora bien:
– Si han pasado menos de seis meses desde que el coche salió del concesionario, se presume que se trata de un defecto de fábrica por lo que si quiere eludir sus responsabilidades legales, la marca será quien trate de demostrar que el fallo se ha producido por mal uso.
– Si han pasado más de seis meses, es el propietario quien tendrá que hacer lo posible por presentar pruebas que demuestren que se trata de un defecto de fábrica. ¿Cómo? La manera más sencilla es conseguir un informe pericial del daño. Ahora bien, en muchos casos, que sea el camino con más posibilidades de éxito no significa que sea el más barato. Desde AutoBild.es nos hemos puesto en contacto con Audatex para saber cuánto puede costar peritar el fallo de un coche, pero nos han dicho que depende de tantos factores que es imposible calcularlo a priori.
¿Qué hacer si tu coche tiene un defecto de fábrica?
Si sospechas que tu coche tiene un defecto de fabricación lo primero que debes hacer es ponerlo en conocimiento de quien te lo vendió. Mario Arnaldo se muestra tajante en este sentido: «no hay que reclamar a la marca, sino al vendedor y este ya se encargará de hacer los trámites que considere necesarios con el fabricante». La reclamación debe ser siempre por escrito para que quede constancia.
Las marcas más fiables según la OCU
– El vendedor acepta que no ha habido mal uso y asume que se trata de un fallo de fábrica. Las reparaciones, en ese caso, correrán por su cuenta y tendrá que acatar las obligaciones que le impone la Ley de Garantías (un poco más abajo te las cuento).Una vez en contacto con el concesionario pueden pasar dos cosas:
– El vendedor atribuye la avería al mal uso y dice que no es su responsabilidad.
En este segundo supuesto no queda más remedio que acudir a la vía civil. Es decir, poner una denuncia. También se puede recurrir al sistema arbitral de consumo que ofrece los mismos resultados que el judicial, pero es gratuito. La única pega es que ambas partes deben estar de acuerdo en llevar el litigio por esta vía.
Los costes judiciales pueden ser largos y costosos, pero si llegas hasta el final y el juez te da la razón, puede exigir que te paguen.
Fuente: Autobild