El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dijo que con la aplicación del nuevo Sistema de Justicia Penal se fortalecen las instituciones y con ellos la convivencia diaria en las comunidades.
Ahora vamos por la transformación del sistema penal, pero sobre todo por la transformación de la realidad que este éste produce y resguarda, expuso al encabezar la ceremonia de inicio del Nuevo Sistema de Justicia Penal en nueve entidades del país.
Ante los titulares de la Procuraduría General de la República, Arely Gómez González, y de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Luis María Aguilar, declaró que la justicia es la base de la libertad, la igualdad y de los ejercicios de los derechos, es el cimiento para construir la tranquilidad duradera y afianzar la unión como sociedad.
Por ello donde hay justicia, hay armonía y desarrollo; donde hay justicia los ciudadanos tienen más confianza para construir un mejor presente y futuro para sus familias.
De ahí la importancia de la transformación del sistema penal que como Estado se lleva a cabo y de los avances que poderes públicos, órdenes de gobierno y sociedad han logrado, abundó el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Hoy gracias al trabajo coordinado y la suma de esfuerzos, a partir de este momento el sistema acusatorio a nivel federal está vigente donde habitan tres de cada cuatro mexicano, y el compromiso de la Suprema Corte y de su presidente han sido fundamentales.
Osorio Chong mencionó que ante la comisión de un delito, las instituciones de procuración de justicia y administración de justicia actuarán de forma cada vez más expedita, transparente e imparcial, mientras que los juicios penales serán más objetivos, garantizarán el debido proceso y brindarán certeza jurídica en todo momento y en cada lugar.
El nuevo sistema debe proteger al inocente y castigar a los culpables. Se trata de que obtener justicia no sea privilegio de algunos, sino derecho de todos, porque el imperio de la ley significa antes que nada igualdad ante una ley congruente y clara, sin discreción para aplicarla.
Para lograrlo se trabaja con determinación y suma de esfuerzos, se generan consensos y concretan acuerdos, con el objetivo de alcanzar la justicia cercana, humana y accesible que la Constitución mandata y la sociedad demanda, añadió.
Está claro en el nuevo sistema penal acusatorio, más allá de las modificaciones legales, se requieren también cambios en la estructura, organización de las instituciones locales y federales, porque más allá de órdenes de gobierno, es una obligación consolidar un efectivo acceso a la justicia en cada rincón del país.
Con ese fin es que se ha destinado un presupuesto de más de 12 mil millones de pesos y se ha avanzado en cada una de las partes que se necesitan, para concretar este histórico cambio de paradigma de la justicia en México.
El sistema acusatorio requiere de nuevas habilidades, conocimiento, formas de hacer y de pensar; de jueces que ejerzan juicio, pero jamás discreción; de agentes del Ministerio Público que no persigan individuos, sino delitos, y de policías que sigan el debido proceso por obligación, pero además por convicción.
En el seno del Consejo de Seguridad, con barras de abogados, hoy se cuenta con los protocolo, la legislación y el plan estratégico de capacitación para los instructores que habrán de capacitar a los más de 333 mil policías, al tiempo que habrá capacitación multilingüe que sea para todos, sin importar color de piel o condición social, aseveró.
Este es el reto de una gran transformación, que es también una gran oportunidad: consolidar a nuestro país como un Estado de derecho, subrayó Miguel Ángel Osorio.
Por eso el secretario pidió no perder de vista que el 18 de junio terminará una etapa y empezará otra, en la cual el sistema acusatorio deberá operar en todo el país.
Ello no significa que la labor esté concluida, aclaró el secretario de Gobernación, pues habrá que iniciar el proceso de evaluación y dar seguimiento permanente para mejorar el sistema.
Fuente: Notimex