El país enfrenta una crisis de derechos humanos por el aumento de las violaciones, así como por la falta de apertura del gobierno para reconocer la situación y aceptar las recomendaciones emitidas por organismos internacionales, señala Perseo Quiroz, director de Amnistía Internacional en México.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Quiroz asegura que existen retos para el país en el tema de los derechos humanos, principalmente en la seguridad pública, la violencia contra las mujeres, tortura, personas desaparecidas, ejecuciones extrajudiciales y transgresiones a pueblos indígenas.
Durante el análisis al documento Informe 2015/16, la situación de los derechos humanos en el mundo, que incluye la situación de 160 países en derechos humanos, refirió que en la actual administración existen “actitudes que son mucho menos receptivas a la crítica y al escrutinio”, frente a las recomendaciones emitidas por organismos internacionales.
En el último, “hemos visto espacios que se han cerrado, actitudes que son mucho menos receptivas a la crítica y al escrutinio internacional”, por lo que hay menos posibilidad de entablar un diálogo constructivo.
Aseguró que “cada día más hay fricciones entre el gobierno mexicano y los organismos, al deslegitimar su trabajo, sus informes, a no prestar la atención debida a las cosas que se están diciendo”, por lo que no espera mejoras en el país si no hay un cambio en la política pública.
¿Qué podemos encontrar en el informe de este año?
—Evaluamos la situación de derechos humanos a nivel global, regional y por país. Una de las cosas en las que se ha centrado el documento es en el ataque que hay a los derechos humanos. Hemos visto cómo alrededor del mundo los distintos gobiernos y estados han empezado una embestida en contra de los sistemas de derechos humanos y de los organismos que vigilan su cumplimento, sean organismos internacionales, nacionales o de organizaciones no gubernamentales.
¿Cuál es la situación que prevalece en el continente americano?
—Hay varios países que enfrentan crisis de derechos humanos fuertes, pero de los países que más preocupan en el continente son México y Venezuela, por la magnitud de la crisis. Las magnitudes y los números de la crisis en derechos humanos en México son preocupantes. En general en el continente encontramos graves crisis de derechos humanos, impunidad en relación con los derechos, en delitos del orden común y uso excesivo de la fuerza. La impunidad la podemos ver en distintos países. El reto que sigue existiendo son los derechos de los pueblos indígenas.
En el contexto internacional, ¿cambia el panorama para México?
—A nivel internacional México es uno de los países que más nos preocupan en la región, pero también es uno de los que nos preocupan en el mundo. De una lista de 20 países, México es uno de los que más nos preocupan.
¿Cómo es que México se ha cerrado a los derechos humanos?
—En general se está cerrando ante todo lo que tiene que ver con un escrutinio internacional. No hay la misma postura que anteriormente, el país había firmado convenios en materia internacional. Cada día hay más fricciones entre el gobierno mexicano y los organismos, al deslegitimar su trabajo, sus informes, al no prestar la atención debida a las cosas que se están diciendo.
¿Hay asistencia por parte de las autoridades a las personas que les son vulnerados sus derechos?
—Lo hemos dicho muchas veces. Cuando elaboramos el reporte comentamos que no estábamos haciendo nada nuevo. Sigue habiendo el tema de no reconocer la magnitud de las cosas y, al no reconocerlo, el diseño de políticas públicas y la reacción ante los problemas son opuestos. Mientras sigamos negando una crisis en derechos humanos vamos a seguir sin reaccionar. Esto ha llevado a una rispidez entre las personas que sostienen las distintas versiones, entre quienes dicen que hay crisis y entre quienes dicen desde el gobierno que sí hay una situación preocupante. Al presentarse esta situación no hay una posibilidad de diálogo efectivo.
¿Cuáles son las principales violaciones a derechos humanos en México que ustedes registran?
—En el informe uno de los retos que vemos para México es ver cómo priorizas en los distintos temas cuando tienes una grave crisis en el tema de los derechos humanos. ¿Qué temas pones en el informe?, porque todos son importantes, pero sin duda el tema de seguridad y derechos humanos, la violencia contra las mujeres, tortura, personas desaparecidas, ejecuciones extrajudiciales y pueblos indígenas son temas que nos preocupan.
¿Hay un tema en particular que preocupe a Amnistía en México?
—Un tema que nos preocupa es el incremento de la pobreza en el país, que afecta la situación de derechos humanos. Otro es la cifra que hemos dado de 27 mil personas desaparecidas, 40% de las cuales se han dado en la presente administración. De 2014 a 2015 se duplicaron las denuncias por tortura. Estas son algunas de las cifras que hemos dado, pero que son incluidas en el mismo reporte, porque desafortunadamente de la crisis de derechos humanos hemos hablado.
¿El informe incluye un análisis de casos en específico?
—El informe no detalla casos en específico, pero sí da muestra de las pro blemáticas. En el tema de ejecuciones hablamos de Apatzingán, de Tanhuato. En desaparición sigue pendiente el tema de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Sí se mencionan algunas cosas, pero sin detallar casos específicos.
¿Se han incrementado los abusos contra mujeres en el último año?
—Sí, tenemos un apartado en el informe que habla de la violencia contra las mujeres y niñas, y de cómo la violencia contra ellas es endémica. Incluye homicidios, violencia sexual y desapariciones.
¿Cuáles son las condiciones que enfrenan los migrantes en su paso por el país?
—Las políticas que se han dado en el contexto migratorio son de endurecimiento y de cierre de fronteras, así como en temas de poner en vulnerabilidad a las personas migrantes. Un caso de ellos es la frontera sur, porque al endurecer la política lo que haces es que llevas a las personas a buscar otras alternativas. Si eran grupos no visibles se vuelven más invisibles, por lo que es más difícil documentar y verificar las violaciones a derechos humanos que están sufriendo.
En el tema de seguridad, ¿se siguen cometiendo abusos?
—Nosotros seguimos documentando abusos de las fuerzas encargadas de hacer cumplir la ley, entre los que se encuentran abusos de las fuerzas federales. Hemos notado un mayor incremento de la Marina en las calles. Continúan desarrollando las labores de seguridad, a pesar de que no están diseñados para atenderlas. Sigue habiendo un tema de seguridad, de derechos humanos, y el tema es que seguimos apostando a un esquema de combate frontal, que ha traído violaciones a derechos humanos, además de que la seguridad no ha mejorado.