Continúa el eco de molestia entre los feligreses que fueron testigos de los privilegios que tuvo la familia del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, durante los eventos en que estuvo el papa Francisco.

A través de redes sociales circulan hileras de sillas que fueron apartadas para un grupo ajeno a los pueblos indígenas, sí, eran destinadas para los familiares, amigos y cercanos al mandatario estatal. El enojo es mayor, cuando el gobernador compartió el pasado 15 de febrero, día de la visita del Sumo Pontífice, un mensaje en imagen en que argumentaba que el gobierno del estado no contaba con boletos para repartir.

En Twitter, tras la Santa Misa oficiada por el Sumo Pontífice, en que pidió perdón a los pueblos indígenas, los usuarios reprobaron a Velasco por monopolizar los mejores lugares.

Y sí hacía falta algo para incrementar el enojo de los fieles, retomaron el mensaje de Anahí, esposa del gobernador chiapaneco, quien en Instagram señaló:

«Un día hermoso! Todo #Chiapas hoy se alegra! El papa Francisco nos deja un mensaje de paz y fe. No importan las diferencias, como hermanos somos un solo corazón. Gracias #AmigoFrancisco”.

Fuente: Excélsior