Decenas de miles de fanáticos vitorearon a los Broncos en el desfile de los campeones del Super Bowlpor el centro de Denver, dejando de lado por ahora algunas interrogantes sobre el futuro del equipo.
Los seguidores abarrotaron las calles, balcones y terrazas mientras los jugadores desfilaban a bordo de camiones de bomberos. El primero tenía el número 18 de Peyton Manning, y llevaba al mismo quarterback, junto con el jugador más valioso del Super Bowl, Von Miller, y Annabel Bowlen, esposa del dueño del equipo Pat Bowlen, quien está enfermo y no participó de la ceremonia.
El quarterback suplente Brock Osweiler firmó balones y los lanzó al público desde otro camión.
Al dirigirse a los fanáticos después del desfile, Manning evitó decir si regresará para jugar otra temporada. Y todavía resta por ver si Denver puede mantener intacta su extraordinaria defensa.
Fuente: La Razón