La nueva Ley de Tesorería de la Federación (LFT) constituye una pieza clave para asegurar que los recursos del erario público se administren de manera eficiente y transparente, coadyuvando con ello a la rendición de cuentas, destacó el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que el pasado 1 de enero de 2016 entró en vigor la Ley de Tesorería de la Federación que deroga la anterior Ley del Servicio de la Tesorería de la Federación (LSTF) que data del 31 de diciembre de 1985.
Explicó que esta nueva Ley fortalece a la Tesorería como una institución de vanguardia en términos de buenas prácticas, ya que favorece la centralización en la administración de los recursos financieros, evitando la existencia de éstos en múltiples cuentas bancarias.
Además, sustenta su operación en medios electrónicos de pago; los pagos se realizan directamente a las cuentas bancarias de los beneficiarios finales; y promueve la inclusión financiera entre los beneficiarios de los pagos del gobierno federal, como los de programas sociales.
La dependencia federal señaló en un comunicado que la Tesorería se ha consolidado como la entidad que administra de manera directa la mayor parte de los recursos presupuestarios.
Esta nueva Ley, agregó, actualiza su marco jurídico, asegurando así la permanencia de un modelo basado en un mayor control en el manejo de los recursos públicos, mayor eficiencia y transparencia.
La Secretaría de Hacienda resaltó que la LTF es una muestra más del compromiso del ´presidente de la República, Enrique Peña Nieto, con un gobierno eficiente, moderno y transparente.
Fuente: MVS