Los futuros del petróleo en Londres se disparaban hasta un 3 por ciento este martes desde su nivel más bajo en 12 años registrado en la sesión previa.
Los precios del crudo se recuperaban después que datos mostraron que la demanda de petróleo en China habría tocado un récord en 2015, sin embargo, los contratos permanecían debajo de los 30 dólares por barril después de que la Agencia Internacional de Energía (AIE) dijo que el mercado permanecerá sobreabastecido este año.
El contrato del Brent para entrega en marzo subían 2.59 por ciento, para cotizarse en 29.29 dólares. En la apertura del mercado ICE de Futuros de Londres, el crudo llegó a subir hasta un 3.8 por ciento y cotizarse en 29.64 dólares por barril, luego de haber cerrado el lunes en los 28.55 dólares.
Por el contrario, el crudo WTI para febrero cedía 0.17 por ciento a 29.37 dólares en la Bolsa de Nueva York, luego de permanecer cerrado en la sesión previa tras un feriado nacional.
Los precios eran respaldados por una fuerte demanda de crudo en China, donde cálculos preliminares de analistas basados en cifras del gobierno mostraron un consumo de petróleo de 10.32 millones de barriles por día (bpd), un 2.5 por ciento más que en 2014.
Sin embargo, los precios permanecían cerca de mínimos de 12 años debido a que el sobreabastecimiento global duraría al menos hasta fines de 2016 y que los precios del crudo podrían caer desde los niveles actuales, estimó la AIE, que asesora a países industrializados en política energética.
Los precios del barril han bajado más de un 70 por ciento en los últimos 18 meses en la medida en que los exportadores de todo el mundo produjeron más de un millón de barriles de crudo por día sobre lo demandado.
El exceso de suministro podría empeorar con el regreso de la producción iraní al mercado tras el levantamiento de sanciones nucleares occidentales por su programa nuclear.
La mayoría de los analistas prevén que el retorno completo de Irán al mercado sería relativamente lento debido a que el país necesita mejorar su infraestructura tras años de bajas inversiones.
Fuente: El Financiero