En un homenaje público a la Policía Federal que incluyó ascensos y condecoraciones a los caídos en el cumplimiento del deber, el presidente Enrique Peña Nieto admitió que en materia de seguridad «aún tenemos mucho por hacer».
Particularmente, indicó, «debemos redoblar esfuerzos para reducir la incidencia delictiva» y lograr así un México más seguro y tranquilo.
El mandatario también demandó a cada corporación de seguridad estar a la altura de la responsabilidad encomendada.
Sobre todo, Peña Nieto puso de relieve la coordinación que han logrado las fuerzas armadas y la Policía Federal porque esa ha sido una de las líneas de acción de este gobierno: el trabajo en equipo de las instituciones encargadas de la seguridad pública.
Las acciones de la Policía Federal, indicó, hoy «tiene resultado visibles» y la sociedad las percibe en los centros turísticos donde hay tranquilidad, en carreteras y caminos confiables, con instalaciones estratégicas resguardadas y con entidades y ciudades más seguras.
Ahí mismo, anunció la intención del gobierno federal por incrementar los programas de vivienda y de becas de estudio para hijos de policías.
El acto tuvo lugar en el Auditorio Nieto. Asistieron diez mil elementos de las distintas divisiones que conforman la corporación y estuvieron además los integrantes del gabinete de Seguridad Pública como el titular de Gobernación, Miguel Osorio Chong, los secretarios de Defensa Nacional y Marina, general Salvador Cienfuegos y almirante Vidal Francisco Soberón y de Educación Pública, Aurelio Nuño, así como la Procuradora general de la República, Arely Gómez y el jefe de la Oficina de la Presidencia, Francisco Guzmán.
Fuente: La Jornada