En la pieza, Perry da un especial informe del tiempo, en el que llama la atención sobre los devastadores efectos que el calentamiento global tiene para los niños alrededor del mundo.
«Sequías, inundaciones, olas de calor y otras severas condiciones meteorológicas están poniendo a los niños en un riesgo creciente de enfermedad y malnutrición, y destruyendo los hogares y medios de vida de sus familias», señala la artista.
Perry anima a los líderes mundiales a actuar para frenar el cambio climático con un acuerdo global y jurídicamente vinculante en la actual cumbre que se celebra en París.
Según Unicef, más de 500 millones de niños viven en áreas con gran posibilidad de inundaciones y 160 millones en zonas de sequías severas, de los cuales 50 millones se encuentran en países donde más de la mitad de la población vive en la pobreza.
Perry fue nombrada embajadora de buena voluntad de Unicef en 2013 y centra sus esfuerzos en trabajar con los niños y adolescentes en situaciones más vulnerables.
Fuente: Excélsior