En un comunicado, la compañía expuso que todavía continúa en peritaje la cuantificación del incidente del 8 de diciembre de 2015, dónde otros pasajeros también divulgaron que el viajero iba en estado de ebriedad y que activó el tobogán de una salida de emergencia del avión.
«La aerolínea considera que los pasajeros disruptivos, quienes tienen conductas violentas o revoltosas que interfieren en las obligaciones y funciones de la tripulación, perturban la tranquilidad de los otros clientes y podrían poner en riesgo la seguridad aérea, son un tema de preocupación para toda la industria (…) acciones como ésta no se deben permitir ni repetir», denunció la empresa.
Además, la compañía agregó que continúa en trabajos con las autoridades por las investigaciones, diligencias y desahogo de pruebas así como en las acciones legales para que el individuo reciba un castigo ejemplar.
El vuelo 714 de Volaris que sería realizado con una avión Airbus A320 llevaba a 179 pasajeros y fue detenido por alrededor de cinco horas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México por la falsa alerta del pasajero.
Fuente: El Financiero