El 2015 será recordado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) como un año de reconocimientos y presencia internacional, toda vez que la cultura azteca y maya dieron mucho de qué hablar en tres países, con grandes exposiciones presentadas en tres continentes.
La cultura azteca, civilización precolombina de la gran región de Mesoamérica, pueblo amerindio de filiación nahua que fundó la gran México-Tenochtitlan, despertó gran interés en el año que concluye con una exposición titulada “Aztecas, Conquista y Gloria”.
La exhibición se presentó en el último trimestre del 2014 en Museo de Nueva Zelanda Te Papaque y concluyó su itinerancia en febrero del 2015, en Australia, donde se presentó en los museos de Melbourne y en el Australiano de Sidney.
Curada por Raúl Barrera Rodríguez, responsable del Programa de Arqueología Urbana del Museo del Templo Mayor, y Lynette Townsend, del Museo de Nueva Zelanda Te Papa Tongarewa, la exhibición estuvo integrada por más de 200 piezas en las que se evidenció la riqueza de la cultura mexica a pueblos distantes geográficamente y poco familiarizados con Mesoamérica.
La colección ofreció un recorrido por la historia de los aztecas, desde su peregrinaje como grupo nómada, su establecimiento en la Cuenca de México, las guerras de expansión, la consolidación de su dominio, hasta la destrucción de su imperio durante la Conquista española.
Dicha exhibición presentó piezas procedentes en su mayoría del Museo del Templo Mayor, así como de la Zona Arqueológica de Teotihuacán, los museos nacionales de Antropología, de Historia y del Virreinato, diversos museos regionales y de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia, al igual que de otras colecciones públicas y privadas.
Exhibió varios objetos emblemáticos, entre ellos la gran escultura de Mictlantecuhtli, deidad de la muerte y del inframundo; un pendiente de oro de Xochipilli, divinidad de las flores y la belleza, y el corazón de Cópil o corazón de piedra verde.
En mayo pasado, y precedida de un gran éxito durante su estancia en Australia y Nueva Zelanda, donde más de 220 mil personas tuvieron la oportunidad de conocer el desarrollo de la también llamada cultura mexica, el Museo Pointe-à-Callière de Historia y Arqueología de Montreal, en Canadá, se maravilló con “Los aztecas, el pueblo del sol”.
En aquella ciudad, el visitante tuvo la oportunidad de preciar esta exhibición hasta el pasado 25 de octubre. Cerca de 250 piezas alusivas a la fundación de México-Tenochtitlan, hacia 1325; su consolidación a lo largo de sólo dos siglos a través de la expansión militar, y su caída a manos de los conquistadores españoles.
La exposición representó una oportunidad para mostrar al público, los mitos que inspiraron a esta civilización a emprender un largo peregrinaje, el cual pueden observar mediante un facsimilar del Códice Boturini, a fin de encontrar el lugar designado por su dios Huitzilopochtli para fundar su ciudad: un lago, lo que implicó un desafío que fue explicado mediante recursos multimedia.
Por su parte, a finales de año, Canadá envió a México, un centenar de vestigios arqueológicos hallados en Quebec, Ontario (Canadá) y Nueva York (Estados Unidos), en una exposición que se tituló “Iroqués: visión arqueológica de una antigua cultura de Quebec”, en el Museo del Templo Mayor, en esta capital.
En ese recinto, se dio cuenta de vestigios de utensilios cotidianos, como ollas de barro, pipas, collares y peinetas; herramientas de trabajo como punzones y puntas de flecha; así como vestigios europeos del siglo XVI y granos de maíz carbonizados.
La exposición ofreció también un apartado específico sobre el maíz, que explicó la importancia de este alimento para la antigua cultura que aplicaba la técnica agrícola “tres hermanas”, que consistía en sembrar maíz, calabaza y frijol en la misma parcela.
Si los aztecas dio de que hablar, la cultura Maya se esparció por el mundo y cautivó a miles de espectadores alrededor del orbe, tal fue el caso del Reino Unido, de manera especial en el World Museum de Liverpool con “Mayas. Revelación de un tiempo sin fin”.
La muestra, que llegó el pasado 18 de junio, estuvo considerada estelar dentro del Año Dual México–Reino Unido. En ella, el público inglés y europeo se deleitó con la cosmogonía, riqueza simbólica y ancestral de una de las culturas más legendarias del mundo.
La capacidad creadora, la sensibilidad estética y la perfección lograda por los mayas se observó en las 385 piezas arqueológicas procedentes de los estados de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán.
Vista por más de 230 mil personas, presentó piezas que abarcan desde el periodo preclásico temprano hasta la actualidad, dentro de los núcleos: Las fuerzas sagradas, El hombre frente al tiempo, Comunidad y vida cotidiana, El corazón de las ciudades y El hombre frente a la naturaleza; Las élites gobernantes y su historiografía; El hombre frente a los dioses: los ritos, y Entrar en el camino: ritos funerarios.
Para José Enrique Ortiz Lanz, coordinador nacional de exposiciones del INAH, esta exposición de la cultura maya, fue la bandera mexicana en el mundo.
Otra exposición sobre esta civilización fue vista en este 2015 en Alemania, bajo el título “Túunben-Maya. Las perspectivas de lo Maya hoy en espacio y tiempo”, la cual integró una serie de fotografías del mexicano Francisco Martín, que reflejan y revelan lo anterior, acompañadas de textos del antropólogo Harry Thomas.
La exhibición mostró las variadas facetas de la vida de los mayas actuales, y constituye el resultado de una investigación científica y artística con una duración de 15 años, hecha por el antropólogo alemán y el fotógrafo mexicano, quienes trabajaron en conjunto en la Península de Yucatán.
El estudio se ocupa también de tradiciones y momentos clave en sus fiestas. Abarca las situaciones difíciles de su vida, tales como la forma de abordar catástrofes naturales o la muerte.
Por otra parte, en este 2015, “Mayas, el lenguaje de la belleza”, culminó su itinerancia en el Museo Nacional de China, en Beijing, en donde se presentó una cuidada selección de 238 piezas arqueológicas de diversos estilos y temporalidades que fue visitada por 134 mil 629 personas.
La muestra fue inaugurada por los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y de la República Popular China, Xi Jinping, el 13 de noviembre del 2014, en el marco de la visita de Estado del mandatario mexicano a aquella nación, y permitió a los visitantes acercarse al legado cultural y artístico de esta antigua civilización, a través de dicha colección de objetos que dan cuenta de más de mil 200 años de historia.
La presentación de “Mayas, el lenguaje de la belleza” constituyó un evento de gran relevancia para el intercambio cultural entre ambas naciones y dio oportunidad al público chino de admirar la vasta colección de arte escultórico y cerámico proveniente de más de 20 museos de los cinco estados de México con presencia maya: Yucatán, Campeche, Chiapas, Tabasco y Quintana Roo.
La exposición se presenta en este momento en el Museo Palacio de Cantón en la ciudad de Mérida, donde fue enriquecida para exhibir, no 238 sino 278 piezas arqueológicas que describen la concepción de la belleza que tenía esta antigua civilización.
Hasta aquí las exposiciones arqueológicas con las que INAH, atrapó la miradas de cientos de espectadores en otras latitudes, bajo la premisa de que en 2016 la arqueología mexicana seguirá sorprendiendo al mundo.
Fuente: MVS Noticias