Asimismo, destaca la importancia de mantener los hábitos alimenticios, preparar entrantes ligeros como, por ejemplo, verduras, ensaladas o sopas ligeras, antes de servir el plato principal; tomar sólo una copa de vino o cerveza por comida; e incluir la fruta en los entrantes, sobremesa o postres.
Comer despacio, con tranquilidad y masticando bien, y servirse en un plato pequeño «de todo un poco» y no repetir, son otras de las recomendaciones aportadas por la fundación. «Por lo tanto, se puede comer de todo pero con moderación, en raciones pequeñas y sin repetir. Todo ello combinado con la práctica de 30 minutos diarios de ejercicio físico», ha zanjado.
Fuente: Valencia Plaza