Bueno, si te conoces demasiado bien y no puedes evitar excederte al disfrutar, entonces tal vez debas leer esto detenidamente. De preferencia en una habitación oscura en la que no haya mucho ruido en caso de que estés buscando desesperadamente «cura para las crudas» en internet.

Si te excedes en esta temporada de fiestas, ciertamente no estás solo. Muchas personas se exceden durante las fiestas, así que hay un sobrenombre médico relacionado con una de las afecciones que ello causa. El «síndrome cardíaco de las fiestas» ocurre cuando tu corazón late irregularmente o demasiado rápido después de haber bebido demasiado.

Afortunadamente, las crudas no son tan graves.

Pero hablando de cosas serias, beber demasiado alcohol puede ser un verdadero problema y puede tener efectos reales en tu salud. Los accidentes vehiculares relacionados con el consumo de alcohol provocan la muerte de alrededor de 24,000 personas al año en México, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.

Pero digamos que tú tenías un conductor designado y que la fiesta se te fue de las manos solo esta vez, así que de todas formas quieres saber qué hacer. Esto es lo que los médicos recomiendan.

Una cruda, en caso de que seas parte del pequeño porcentaje de personas que no la padece, es esa sensación desagradable en tu cuerpo después de una noche de excesos al beber alcohol. Entre los síntomas están cansancio, sed, dolor de cabeza o muscular, dormir mal, mayor sensibilidad a la luz y al sonido, mareos, enrojecimiento de los ojos, temblores, depresión e incapacidad para concentrarse.

Científicamente hablando, es difícil saber qué cura una resaca. Eso se debe a que aún no está bien claro lo que sabemos sobre ella.

«El problema es que aún no sabemos exactamente qué causa una cruda después de beber alcohol, así que es difícil saber exactamente qué prevendrá la resaca, fuera de beber poco o nada», dijo Sharon Horesh Bergquist, médica de Emory Healthcare y profesora asistente de Medicina.

Ella dice que lo que los científicos saben sobre las resacas es que el alcohol, cuando se consume en exceso, puede hacer estragos en tu organismo.

Provoca que quieras ir al baño con mayor frecuencia, lo que puede causar deshidratación. Ese proceso es la causa de la sed, el mareo y el aturdimiento que sientes.

También puede desencadenar una reacción inflamatoria en tu sistema inmunitario. Eso puede afectar tu capacidad de concentrarte, tu memoria y puede hacer que te sientas aletargado.

Beber alcohol en exceso puede provocar que se reduzca drásticamente el azúcar en tu sangre. Si baja demasiado, puede causar temblores y debilidad e incluso convulsiones.

El alcohol puede provocar que tus vasos sanguíneos se expandan, lo que causa dolores de cabeza. También puede irritar el recubrimiento de tu estómago, por lo que te dan náuseas.

Bergquist dice que todos metabolizan el alcohol de formas ligeramente diferentes. A algunas personas les da una resaca tras beber un par de tragos. Otras pueden beber mucho más. Dice que no puedes detener una resaca, pero hay algunas formas de mejorar tus síntomas.

Beber agua mientras consumes alcohol puede ayudarte con la deshidratación.

«Sin embargo, eso no mejora tu concentración o la pérdida de las habilidades de relación espacial que una resaca conlleva», explica.

Comer un poco puede ayudar a tu estómago. Pero comer alimentos grasosos para absorber mejor el alcohol, como algunas personas creen, es un mito. De hecho, la comida grasosa puede irritar más tu estómago. En vez de eso, Bergquist recomienda comer proteínas y carbohidratos saludables.

Pero fuera de evitar totalmente el alcohol, la única forma de aliviar tus síntomas es sencilla:

«El descanso es la única forma en la que realmente puedes ayudarte», dijo Bergquist.

Así que intenta dormir. Te sentirás mejor, tarde o temprano.

Fuente: Zócalo