El secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda del Distrito Federal, Felipe de Jesús Gutiérrez, culpó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador de provocar un crecimiento urbano en zonas rurales y asentamientos irregulares en suelo de conservación con su programa de desarrollo aprobado en 2003.
Al comparecer ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Gutiérrez Gutiérrez afirmó que el Programa General de Desarrollo Urbano que impulsó en aquella ocasión el ahora líder del partido Morena estableció un crecimiento orientado al centro de la ciudad, que generó especulación y elevó el costo del suelo.
“Por otro lado tenemos sectores del territorio de la capital que presenta una subutilización de su equipamiento, la infraestructura y los servicios instalados. Estas zonas, por tanto, estarían en la capacidad para absorber población, lo que permitiría arraigar la población capitalina”, indicó el funcionario.
Dijo que el Bando II de López Obrador provocó una situación similar a lo que ocurrió con la polémica Norma 26, que fue aprovechada por los desarrolladores inmobiliarios.
Al titular de la Seduvi le secundó el vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD, Raúl Flores García, quien al fijar el posicionamiento del partido aseguró que el sol azteca está a favor de modificar a fondo la polémica Norma 26 de la Ley de Desarrollo Urbano, ya que la reforma realizada durante la administración de López Obrador sólo buscó justificar el Bando II emitido ese año.
“Sin pensar en la condición de la infraestructura y el equipamiento necesarias para el desarrollo ordenado de las viviendas en el Distrito Federal, causando el encarecimiento brutal del valor del suelo y problemas urbanos ambientales se concentraran en zonas específicas”, indicó.
En entrevista posterior, el secretario de Desarrollo Urbano suavizó su posición y señaló que la intención del gobierno de López Obrador fue sana, pues intentaron que los capitalinos se fueran al centro de la ciudad.
“Pero fue insuficiente, igual no había el instrumental necesario y eso al final con la aplicación del Bando II originó un poco la reacción que hoy tenemos con la Norma 26 porque el que sólo se pudiera construir en cuatro delegaciones, aunque se hizo en tres”, señaló.
Al respecto, el diputado de Morena, David Cervantes Peredo, respondió que el proyecto que se ha impulsado en las dos últimas administraciones del GDF tiene como punto de partida una concepción basada en la mercadotecnia y no una visión de desarrollo.
Fuente: Crónica