Los fuertes vientos con lluvias y desbordamiento de ríos y arroyos ocasionaron daños en ocho mil 280 hectáreas de cultivos en los municipios jalisciense, tras el paso del huracán Patricia.
Los principales cultivos afectados, de acuerdo con un recuento hecho por la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) del gobierno de Jalisco, son los platanales de los municipios de Cihuatlán y Tomatlaá, así como de papaya y maíz.
La Seder informó que alrededor de cinco mil jornaleros que laboraban en el plátano, plantación de la que dependían dos mil familias, quedaron sin trabajo.
Hay un sinnúmero de caminos de acceso a cosechas dañados, igual que la infraestructura hidráulica de los municipios de Tomatlán, Cabo Corrientes, La Huerta, Mascota, Talpa de Allende y Autlán.
Otro municipio con afectaciones severas es Jamay, donde se siniestraron dos mil hectáreas de maíz y otras mil de granos. En el municipio de Mascota, en la sierra de Jalisco, los efectos de Patricia llegaron con abundante agua.
Fuente: La Jornada