A muy pocos días de su toma de protesta, Jaime Rodríguez Calderón El Bronco, ya como gobernador del estado de Nuevo León dice en entrevista: “Seremos un ejemplo de gobierno y Nuevo León volverá a ser el estado líder del país”.
— ¿Es bueno ser independiente, no pertenecer a ningún partido político?
— “Claro que sí, eso hace no tener compromisos con nadie. Solamente con los ciudadanos; tampoco se tiene alguna presión para tomar las decisiones que se tienen que tomar en un gobierno. Y nosotros tenemos un gabinete que está comprometido con la sociedad.
— ¿Pero cree usted en algún partido político?
— “No, no creo. Creo que esto en México está agotado, la partidocracia está llegando a su fin. Los ciudadanos desean otro tipo de gobiernos, donde participen más los ciudadanos y menos los partidos políticos. Nuevo León es un ejemplo de ello, salió a votar por esa propuesta y obviamente daremos resultados, de hecho los estamos dando; estamos haciendo lo que dijimos en campaña y vamos a romper con todos los vicios que tienen los partidos políticos; porque los que llegaron al gobierno gobiernan nada más para sus equipos, para sus cúpulas partidarias y no han gobernado para una sociedad”.
— ¿En su gabinete hay gente que fue de otros partidos políticos?
— “Lo interesante de este gabinete es que han renunciado a su militancia partidista. A eso me referí en campaña, nadie en el gobierno militará en algún partido político ni trabajará en ningún otro”.
— ¿Tiene usted amigos políticos de diferentes partidos?
— “Yo tengo amigos en todas partes, amigos curas, amigos pastores, amigos en la comunidad rural, en todas partes, yo soy muy amiguero”.
— Ha dicho usted que ha recibido la casa sucia, ¿qué se hará al respecto, se llamará a los responsables, entre ellos a Rodrigo Medina?
— “Vamos a limpiar la casa y vamos a hacer responsables a quienes la ensuciaron. Hay una deuda de más de 100 mil millones de pesos. La gente me cree, los únicos que no me creen son los periodistas que siguen siendo parte de un sistema caduco y podrido. Yo soy un hombre de hechos, voy a cumplir lo que dije, obviamente tengo que preparar las cosas; esto no se hace de la noche a la mañana, llevo 15 días en el gobierno. Evidentemente tengo un gran equipo de trabajo que está trabajando para resolver los problemas y también para hacer las investigaciones correspondientes, he dado instrucciones para que en todas las dependencias investiguen hechos irregulares y no me voy a apresurar, tengo que hacerlo bien.
— Ha hablado de periodistas, ¿quiénes son ellos?
— “Son todos aquellos que están coludidos con el gobierno, que éste les pagaba a muchos de ellos, a medios de comunicación. Y eso también lo daré a conocer en su momento. Televisoras, medios escritos, medios electrónicos, etc. A eso yo le llamo perversión, corrupción de un sistema. Ya que los medios que eran sostenidos por ciertos gobiernos no se dedicaban a comunicar, a ser objetivos, a ser imparciales. Sino enaltecían la soberbia, la egolatría de los gobernantes; en Nuevo León recibieron muchas dádivas, más de ocho millones de pesos en seis años, eso es algo perverso para un estado en el que tenemos todavía muchos rezagos; donde hay mucha gente que necesita ir al escuela, madres de familia que trabajan y que necesitan estar más tiempo con sus hijos. Hay escuelas que no tienen suficientes equipos para educar a nuestros niños… Sé que me van a poner una “chinga” al decir esto, pero es la verdad. Hacerme amigo de “esos” medios de comunicación corruptos es como si yo fuera amigo de los zetas, o de los cárteles del Golfo; al menos sabemos que esos son delincuentes, y que a esos los combatimos. Creo que hoy las televisoras y los medios de comunicación tienen que entender que no deben de estar viviendo del gobierno. Y como también el gobierno tiene libertad de expresión, yo lo digo así, ese es el derecho que se me da al ser mexicano, es mi pensamiento y el criterio que tengo sobre los medios de comunicación”.
— Tiene usted pocos días en su gobierno, ¿en cuánto tiempo se verá un Nuevo León diferente?
— “Yo le pedí a los nuevoleonenses los 90 días de este año, porque no tenemos presupueste, se terminaron todo lo que había. Y esos 90 días son para organizarnos, para ordenar el gobierno, Para preparar las investigaciones que tenemos que hacer sin afectar las acciones y prestaciones de servicio que el estado da, como es el caso de salud, escuelas… Que el estado no se detenga, Nuevo León es un estado poderoso, los que vivimos y nacimos aquí fuimos creados para vencer las adversidades, pero nos vino a gobernar uno de Coahuila y nos dio en la torre. Vamos a trabajar y seremos un ejemplo de gobierno. Y para darles una idea, este jueves iniciamos un nuevo proceso de licitación de obras, en donde ya no serán licitaciones a escondidas. Las vamos a hacer públicas porque así lo dice la ley: “públicas”. Convocaremos a todo aquel que quiera participar, no solamente a los cuates o amigos del funcionario, del gobernador, vamos a abrir las licitaciones a todo aquel que quiera participar y que esté inscrito en el padrón, y los que no lo están tendrán tiempo para inscribirse, porque publicaremos los precios establecidos”.
— ¿Tiene usted el respaldo del Presidente para sacar a Nuevo León adelante?
— “Sí, el Presidente ha sido muy cordial con nosotros, nos ha escuchado muy bien, tiene mucha disposición de ayudarnos a resolver los problemas, tengo su ofrecimiento para hacer el gobierno que se necesita en este país. Estamos de que es lo que podemos hacer de manera conjunta de manera coordinada para sacar adelante Nuevo León, Nuevo León es México y así lo entendió el Presidente y su equipo de trabajo, no hemos tenido problemas con ellos hasta este momento”.
— Anda usted un poco “bronco”, en especial con Andrés Manuel López Obrador, ¿por qué?
— “Claro que no, lo que pasa es que él me agarró de su ‘puerquito’ y yo no soy ‘puerquito’ de nadie, yo ni lo pelo. Creo que él tiene el concepto viejo de hacer política, el de pelearse con todo el mundo que cree que puede ser su competencia. Yo no soy su competencia, yo no voy a competir con él; todo se basa en una propuesta de trabajo, creo que este tipo de discurso o de acciones no son las que le convienen a un país para que salga delante. Reconozco que él está haciendo su lucha y está buscando quien lo pueda revivir, y no seré yo. Lo sigo invitando a jugar beisbol, porque creo que no sabe jugar, y hay que enseñarle. México es un equipo en el que tenemos que jugar todos para avanzar. A él ya le tocó gobernar, tuvo su oportunidad, él es dueño de un partido político, y yo no, él usa los recursos públicos para andarse promoviendo, y yo no lo hago así. Él vive de las prerrogativas del gobierno al que critica y al que ataca”.
Fuente: Crónica