Caballerosamente su compañero Nico Rosberg le cedió el paso en las últimas y Lewis Hamilton fue el primero que vio ondear delante del morro de su Mercedes la bandera de cuadros que le declaraba ganador del GP de fórmula 1 de Austin.
La victoria, combinada con el tercer puesto de Sebastian Vettel (Ferrari), el único rival que podía hacer peligrar su liderato, convirtió al piloto británico, de 30 años, en ganador del Mundial de 2015 cuando aún quedan por disputar tres grandes premios. Es el tercer título del conductor de Stevenage, que renueva su victoria de 2014 con Mercedes. El primero lo consiguió en 2008 pilotando un McLaren.
Rosberg es segundo y Vettel tercero. Verstappen y Pérez completan en el top 5.
Fuente: El País