El tenista serbio Novak Djokovic amplió su racha ganadora en el Abierto de China a 27 partidos con un demoledor triunfo por 6-2 y 6-2 frente al estadunidense John Isner.
El número uno del mundo mostró una excelente forma, concediendo apenas tres ‘aces’ en una actuación magistral con la que llegó a las semifinales en Pekín.
El serbio persigue su sexto título en Pekín y el séptimo del año, después de haber conseguido entre otros el Abierto de Australia, el de Estados Unidos y Wimbledon.
Su próximo contrincante será el español David Ferrer, que viene de ganar la semana pasada el Abierto de Malasia. Ferrer pasó con facilidad a semifinales con una victoria por 6-3 y 6-1 ante el taiwanés Lu Yen-hsun.
Bastante peor lo pasó el español Rafael Nadal en cuartos de final contra el estadunidense Jack Sock, al que se impuso por 3-6, 6-4 y 6-3 en un disputado partido.
El español aún tiene dificultades para mostrar su mejor forma, pero se mostró contento con haber avanzado en la competencia.
Acabé el partido jugando mejor de lo que empecé. Este año perdí muchos partidos cuando iba con ventaja», dijo Nadal.
«Así que tener la oportunidad de ganar un partido pese a empezar perdiendo es importante para mí», añadió.
Nadal se medirá en semifinales al italiano Fabio Fognini, que venció al uruguayo Pablo Cuevas por 6-1, 2-6 y 6-2. Nadal ha perdido tres de sus últimos cuatro partidos contra Fognini, incluido un duelo de tercera ronda del Abierto de Estados Unidos.
«Cuando juegas contra un gran jugador, especialmente si no estás en tu mejor nivel, tus oportunidades son menores», dijo Nadal.
«Si puedo jugar a mi mejor nivel mañana, tendré posibilidades. Si no, será difícil. Es sencillo. El deporte es sencillo. El ganador es el jugador que juega mejor. Fognini lo hizo mejor que yo en los tres partidos que me ganó», añadió.
En el cuadro femenino, la finalista de Wimbledon Garbine Muguruza pasó a semifinales al derrotar a la estadunidense Bethanie Mattek-Sands por 6-1 y 7-5, uniéndose en la ronda de las cuatro mejores a Ana Ivanovic, Agnieszka Radwanska y Timea Bacsinszky.
Fuente: Excélsior