El vicepresidente anunció este jueves que no buscará la nominación demócrata para las presidenciales de 2016 en una declaración desde el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca en la que estuvo presente el presidente Barack Obama y la esposa de Biden, Jill.

El esperado anuncio pone fin a meses de expectativas sobre su participación en la contienda demócrata por la Casa Blanca.

El vicepresidente de 72 años explicó que había retrasado su decisión debido al duelo por la muerte de su hijo Beau el 30 de mayo por un cáncer cerebral.  «Desafortunadamente creo que nos hemos quedado sin tiempo», dijo Biden. Varios de los candidatos demócratas llevan meses pidiendo el voto por todo el país y han sentado los cimientos de sus equipos de campaña.

La decisión de Biden refuerza la candidatura de Hillary Clinton, clara favorita en las encuestas. Una entrada de Biden en la contienda habría sacudido los sondeos.

Biden, sin embargo, aclaró que no se limitará a ser un espectador durante los próximos 12 meses y medio. «Aunque no seré candidato, no permeneceré en silencio», dijo Biden, que añadió que promoverá sus ideas y la visión del presidente Barack Obama durante la campaña.

La posibilidad de que Biden se uniera a la carrera electoral cobró fuerza en agosto pasado, cuando una columna de opinión publicada en The New York Times relató que, poco antes de morir, su hijo Beau le pidió que postulara a la presidencia.

Hasta ahora, Biden se había limitado a decir que no sabía con certeza si contaba con la fortaleza emocional que requiere una campaña electoral. Pero, ante la duda, sus partidarios aceleraban la maquinaria.

El grupo Draft Biden recaudó entre 2.5 millones y 3 millones de dólares hasta fines de septiembre y comenzó a contratar personal en casi una docena de estados cruciales para las primarias, según reportes del New York Post y la agencia Reuters.

Fuente: Crónica