Samsung desea seguir a la vanguardia y todo parece indicar que su fuerte está en las pantallas; anteriormente se pudo apreciar como su Galaxy S6 Edge cuenta con una curva por ambos lados de la pantalla. En esta ocasión, la empresa surcoreana tiene algo planeado para inicios del 2016.
Según el sitio Mashable, la firma podría lanzar un smartphone con una pantalla flexible el próximo enero, no por tener una mala calidad, sino porque el diseño así lo requiere.
Además, el dispositivo podría venir en dos modelos, con 3 GB de RAM, una ranura para tarjetas miscroSD y una batería no extraíble. En cuanto al procesador, sería un Qualcomm Snapdragon 620 y un chip 820.
Los rumores también indican que no sería el Galaxy S7, y que posiblemente el nuevo smartphone solo estaría disponible en Corea del Sur, como ya ha pasado anteriormente con otros modelos de Samsung.
Fuente: El Universal