El presidente Enrique Peña Nieto descartó sorprender al país con la adquisición de algún otro inmueble tras la fallida compraventa de la casa blanca en las Lomas de Chapultepec.
En una conversación con el director general editorial de Grupo MILENIO, Carlos Marín, en El asalto a la razón, el mandatario negó categóricamente padecer cáncer y rechazó también las versiones sobre un distanciamiento con su esposa, Angélica Rivera.
«Sí, estoy un poco más delgado que cuando llegué, no tengo cáncer, estoy perfectamente bien de salud», dijo respecto a sus condiciones físicas; y sobre la relación con su cónyuge remarcó: «Nuestro matrimonio está perfectamente bien. Y la verdad yo soy el primero en sorprenderme, como ella, y a veces con buen humor nos reímos de por qué dicen que tenemos algún problema cuando no existe».
Durante la charla en Los Pinos, Peña Nieto sostuvo que los cambios en su gabinete no tienen que ver con la sucesión presidencial de 2018, advirtió que su cuestionamiento al populismo no tiene un destinatario en particular y dijo que el Pacto por México es motivo de orgullo por sus grandes beneficios al país, más allá de quienes hoy se desdigan o se arrepientan de haber suscrito dicho instrumento.
UN AÑO DIFÍCIL
El Presidente reconoció que su tercer año de gobierno ha sido particularmente difícil por la sucesión de hechos como la desaparición de 43 normalistas en Iguala, las presuntas ejecuciones extrajudiciales en Tlatlaya y el asunto de la fallida compraventa de la casa blanca.
Admitió que las aclaraciones sobre el inmueble fueron tardías, pues no advirtió a tiempo la dimensión del caso en la percepción de la sociedad mexicana.
«Me parece que el asunto cobró una dimensión, honestamente, insospechada, yo no hubiese imaginado que mi esposa, producto de su trabajo, de forma yo creo que muy legítima, hubiese adquirido una propiedad, y de quien la adquirió, y estaba en proceso de irla pagando, hubiese despertado la suspicacia de un conflicto de interés. Debo reconocer que quizá ése fue un error. Fue un error no advertido, no visto, el que se pudiera pensar que había este elemento», dijo. Peña Nieto reconoció que esos hechos lastimaron la confianza en el Estado mexicano y en sus instituciones.
«Por ello ofrecí una disculpa pública, porque también señalé que todo eso apunta a que un funcionario público y especialmente el Presidente de la República no solo debe acatar y cumplir puntualmente con la ley, sino además debe evitar cualquier acto que pueda despertar alguna suspicacia de alguna voz», puntualizó.
Presidente, ¿no nos sorprenderemos en los tres años que vienen, en algún momento, con que sale por ahí, no sé, un chalet en una playa o un rancho por ejemplo en Puebla?
Carlos, descuenta desde ahora y tenlo por seguro que después de esta experiencia, ni siquiera me anima, ni deseo tengo, y aunque lo hiciera de forma legal y legítima, por ahora, de adquirir algo. Ahí está, mi declaración patrimonial es pública, ahí están bienes, ahí están las propiedades y demás, ahí están.
¿Qué diferencia encuentra en este caso como se ha dado, y usted debe saber más que yo cómo está la percepción pública, cuál es la diferencia sustantiva con lo que está viviendo Guatemala?
Mira, no conozco los detalles del caso Guatemala, no puedo emitir un juicio sobre el tema; sin embargo, sí puedo decir que sobre este asunto varios jefes de Estado en su momento nos pronunciamos por que realmente hubiese un respeto a las instituciones en el país vecino de Guatemala, porque si hubiese respeto a la legalidad y a la institucionalidad, y sin poder emitir juicios mayores porque no conozco los detalles del caso.
«ESPLÉNDIDA RELACIÓN»
Continuamos, presidente Enrique Peña Nieto, aquí en esta casa presidencial, pues en este «Asalto a la razón», y como tocamos el punto de la canija desconfianza a la que usted aludió en su mensaje del tercer Informe, pues yo quiero irme de plano a otras aristas que tienen que ver con su vida personal: ¿este asunto puso en riesgo su matrimonio?
Déjame decirte que sí he recogido muchos comentarios, especialmente en las redes sociales, del supuesto distanciamiento con mi esposa, el cual, no existe. Yo creo que tengo una relación espléndida con mi esposa.
Si me preguntas de dónde viene, no lo sé. Auténticamente lo voy a decir, del invento, de la…
Sí, pero sabe que ha habido fotografías y videos, inclusive en viajes, y que parece que ella a usted…
Yo no he visto nada, yo lo único que he visto es lo que a cualquiera le puede pasar, pues que de repente, fíjate, me dio risa que un día sin querer me volteé y le pegué, y le dije qué bueno que nadie nos grabó porque ahora sí auténticamente sin querer te di un codazo. La verdad es que, a ver, Carlos, pues yo creo que nada que no sea de algo común y que ha despertado…
No, pero yo pregunto específicamente si el asunto de la casa, que ya no habitarán, y que por cierto, entiendo que nunca estuvo a nombre de su esposa…
Nunca lo estuvo, porque nunca terminó de comprarla.
¿Y eso puso en riesgo su matrimonio?
Nunca, Carlos. A ver, sí debo decir que fueron momentos difíciles, que afectaron el ánimo familiar, especialmente en mi esposa, pues porque ella no está acostumbrada a este tipo de avatares ni tiene por qué estarlo, ella siempre ha estado o había estado dentro del ámbito artístico y yo debo reconocer la entereza, la valentía que tuvo cuando se explicó este tema, de haberlo hecho ella y con todo lo que después derivó, la verdad ella mostró una gran entereza, una gran solidaridad, y nuestro matrimonio está, honestamente y tú lo has podido observar, perfectamente bien. La verdad yo soy el primero en sorprenderme como ella, y a veces con buen humor nos reímos de por qué dicen que tenemos algún problema cuando no existe.
«GOZO DE CABAL SALUD»
Usted ha estado, cuando menos en dos ocasiones, sujeto a cuidado en el Hospital Central Militar. Se llega a decir que tiene un problema terrible. Se dice que Enrique Peña Nieto está más delgado que cuando llegó y tiene cáncer.
Sí, estoy un poco más delgado que cuando llegué, no tengo cáncer, estoy perfectamente bien de salud. Ya lo he dicho muchas veces, espero que quienes me vean lo noten, tú podrás dar un testimonio, me has visto. Recientemente participé en una carrera que, además, sin saber ni haberme propuesto, porque no sabía que me iba a ir tan bien.
Es cierto, en el maratón del Estado Mayor…
No, no. Maratón no corro. Nunca he corrido un maratón.
Bueno, la carrera del Estado Mayor.
Son diez kilómetros y afortunadamente los puedo correr muy bien. He participado cada año. Te invito.
LAS REFORMAS Y EL PACTO
¿Qué tanto cree que su gobierno esté realmente moviendo a México? Y moviéndolo, desde luego, positivamente.
Me parecería pretencioso que yo hiciera una calificación, Carlos. Lo que sí te puedo decir es que sí hemos movido a México y creo que en términos muy positivos. Cuando me preguntan cuál es el logro mayor que se puede tener de esta primera mitad del gobierno, ¡pues hombre!, haber logrado 13 reformas estructurales, que significan cambiar la Constitución, cambiar leyes constitucionales, 90 reformas a 51 artículos de la Constitución, que parece que no es un tema fácil, y que además se trata de temas que por muchos años se había intentado legislar y no se había logrado. ¿Y sabes qué hizo posible que lo pudiéramos hacer?
El Pacto por México, del que están arrepentidos los que lo firmaron, excepto su partido.
No, Carlos. A ver, el Pacto por México yo creo que es algo que debe enorgullecer a los mexicanos, porque logró que la confianza fuera una constante y una variable que estuviera presente en la relación de las distintas fuerzas políticas. Y yo creo que más allá, quienes eventualmente hoy se desdigan, se arrepientan, a final de cuentas hay que reconocer que lo que se hizo a partir de ese Pacto por México en torno a una agenda de reformas será de grandes beneficios. Es y lo seguirá siendo de beneficio para México. Yo dejo, mira, yo no voy a calificar, dejaré que sea la sociedad en el curso del tiempo y a partir de los beneficios que sienta que este gobierno y que las reformas traigan para ellos las que califiquen.
SIN DEDICATORIA PERSONAL
A ver, Presidente, usted hizo referencia a quienes proponen o formulan soluciones demagógicas y populistas, pues no soy el único que lo leyó. El propio partido de López Obrador se dio por aludido y dice «Peña Nieto ya nos abrió paso a Los Pinos en 2018». Recuerdo cuando se dijo que Vicente Fox hizo crecer lo presidenciable de Andrés Manuel López Obrador. ¿No cree usted que le hizo un favor con la alusión?
Primero te digo lo que dije e hice una reflexión sobre lo que México debe cuidar a partir del escenario que estamos viviendo, a partir de lo que se ha vivido en el mundo, en otros pasajes de la historia. Yo sé a ley que el mundo no se ha recuperado suficientemente de la crisis que vivió en 2008, y eso ha deparado evidentemente en una falta de crecimiento económico en distintas partes del mundo; México no ha logrado tener el nivel de crecimiento deseado, pero es porque el mundo tampoco está jalando igual. De hecho somos de los países que, no obstante no crecer lo que quisiéramos, estamos creciendo. Y señalé que lo que está moviendo esto es la economía interna.
Me llamó la atención, y mucho, la parte en que usted aludió a la no me acuerdo qué medalla tiene México frente a los treinta y tantos países de la OCDE.
La OCDE, que agrupa a las 34 principales economías del mundo, dijo que México es el país de mayor número de reformas, que ha hecho mayores reformas para su crecimiento y desarrollo.
Pero lo que le decía a usted es, ¿México puede ser una potencia económica?
Lo va a ser y esa es la proyección de mantenernos en esta ruta, de no apartarnos de la ruta de hacer un manejo responsable de las finanzas públicas, de cuidar la estabilidad económica y de seguir impulsando el crecimiento y el empleo del país. Eso está pasando en México. Pero déjame ir ahora a tu otra pregunta, Carlos, porque no quiero dejar de responderla.
La reflexión que hice no tiene destinatario, Carlos. Es una reflexión sobre lo que no queremos, desearía que no pasara para México, que significara apartarnos del respeto a las instituciones, del respeto a lo que hemos construido entre todos y del respeto a las distintas visiones que han enriquecido la nación que hoy tenemos.
LAS EQUIVOCACIONES
Le pido que, con confianza, y sobre todo, pues para que la audiencia sepa, ¿cuáles reconoce usted que hayan sido sus dos, tres, más fuertes equivocaciones?
Una, el no haber dado dimensión inmediata a lo que había ocurrido, por ejemplo, en Iguala, como nadie se la dio en ese momento, ni siquiera los propios medios que dieron cobertura al tema, no obstante que la Procuraduría General de la República actuó y prestó apoyo a la procuraduría de Guerrero.
¿Algún otro?
Lamentablemente, el no haber tenido una respuesta, quizá mucho más oportuna, precisa y clara sobre el supuesto conflicto de interés, y tuviera este escalamiento. Lo deseable, ya te lo puedo decir a toro pasado, fue quizá haber explicado como se explicó, pero quizá en la oportunidad en la que se debió haber explicado, que no se hizo sino hasta que regresamos de esta gira internacional y me parece que eso solo abonó a seguir sembrando desconfianza.
¿Alguna otra equivocación que lamente?
Lamentable, y enojo y frustración, la fuga de El Chapo. Yo creo que esto, sin duda, exhibió lo vulnerable que es nuestro sistema penitenciario, la necesidad de reforzarlo, de trabajar, y que es un tema que tenemos que cuidar.
LA SUCESIÓN
Presidente, yo no sé si usted vio su «caballada» medio vulnerada, porque parece que se reforzó, en la misma metáfora porque no son animales, cuando menos irracionales, pero pareciera que el «establo» se enriqueció con la inclusión, por ejemplo, de Aurelio Nuño en el gabinete. ¿Vio usted ya medio tocados a los secretarios de Hacienda y de Gobernación? Y, por lo pronto «Pepe» Meade, ya el cuatro veces secretario de Estado en dos administraciones de signo distinto en lo político, pues parece que fuera como «Terminator». ¿Esos cambios ya tienen que ver con lo que usted está pensando para 2018?
Tienen que ver, Carlos, con las metas, los objetivos y lo que debo cumplirle a los mexicanos, y con lo que me he trazado hacer.
Yo estoy hablando de la sucesión presidencial.
Pues esta tocará cuando venga su tiempo y le tocará a los partidos definir sus candidatos. Para presidente de la República.
En este momento Enrique Peña Nieto es como técnico. Me consta de hace años que es impenetrable en lo que él ya maquinó aquí o planeó y es muy difícil sacarle la nata, la «neta»…
Pero dame un crédito. A ver, Carlos, dame crédito en algo. Tienes muy claro que, como pragmático que soy, que tú me lo dijiste, estoy orientado a un solo propósito que es realmente lograr las metas. A ver, sí representa un gran reto, Carlos, y un gran desafío, demostrar que este, proyecto de país que hemos postulado, que hemos venido construyendo sobre la base de hacer cambios estructurales, de colocar los cimientos, nos lleve al México que ofrecí a la sociedad mexicana. He reforzado el equipo de trabajo precisamente por la necesidad y conveniencia que así he advertido como responsable del gobierno de realmente reforzar algunas áreas, imprimirles mayor vitalidad a otras; y a partir de lo que me ha dejado conocer de mejor manera a cada uno, algunos que fueron removidos de un área para pasar a otra y a otros que se incorporaron por primera vez al gabinete, puesme ha tocado conocerlos y saber realmente de su trayectoria y de lo que han logrado en otras responsabilidades. Espero que ese conocimiento y esa experiencia la pongan hoy al servicio de la tarea que les he confiado.
Fuente: Milenio