Los representantes de las diferentes fuerzas políticas en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal fijan posiciones en presencia del jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, en sesión en la que éste rendirá el tercer informe del estado de su administración.
Destacan las críticas al gobierno de la Ciudad de México, pero también se han reconocido avances y han ofrecido trabajo legislativo a favor de los capitalinos, además de plantear que se privilegien el diálogo y los acuerdos, pero sin extenderle al jefe de Gobierno un «cheque en blanco» ni actuar con sumisiones.
El líder de la bancada de Morena, César Cravioto, planteó a Mancera: «No todo en su gobierno es color de rosa, hay muchas cuentas alegres y francamente también mucho por rectificar. En Morena, con fraternidad le decimos, acate el veredicto electoral y enmiende el camino. Si así lo hiciera, cuente con nosotros para que esta vuelva a ser la ciudad de la esperanza».
El legislador local ofreció diálogo en cualquier instancia, «pero no componenda», y aseguró que con el gobierno capitalino «hablaremos de poder a poder, sin amagos, de manera franca».
El diputado Adrián Rubalcava, del PRI, dijo que la percepción de capitalinos sobre su calidad de vida es que se ha deteriorado.
Reconoció avances importantes en la administración de Mancera, pero destacó que hay pendientes en materia de seguridad y en la prestación de servicios públicos, entre otros.
Jorge Romero Herrera, por la fracción del PAN, destacó que en la Asamblea Legislativa «se acabó el aplastamiento político» y aseguró que ese grupo pugnará por la restitución a los jefes delegacionales de las facultades que cada sexenio se les han quitado.
Aseguró que se opondrán a una política social que se pervierta y se convierta en clientelismo electoral, porque eso no es asistir, sino abusar de quienes más necesitan de una auténtica asistencia social.
Romero Herrera planteó que ese grupo parlamentario apoyará iniciativas de cualquiera de las fuerzas políticas, siempre que sean para el bien común.
Por el grupo parlamentario del PRD, Elena Edith Segura, destacó el ejemplo que marca el jefe de Gobierno capitalino, al escuchar las posiciones partidistas, «un ejemplo ahí donde la ausencia y la simulación se llevó a cabo a nivel federal».
Dijo que esa fracción apoyará la nueva cultura laboral del gobierno capitalino e impulsará la mejoría del salario mínimo, además de coadyuvar en la investigación sobre las fallas de la Línea 12 del Metro hasta sus últimas consecuencias.
El diputado Luciano Jimeno, del Partido Humanista. exhortó a que la principal tarea política y reformadora de este trienio sea la de instalar el primer Congreso Constituyente, que de vida a un nuevo pacto social, de inclusión y cohesión; una ciudad humanista y prospera, pero también una ciudad segura y con justicia, donde todos seamos realmente iguales ante la ley.
Antonio Javier López Adame, legislador del PVEM, reconoció que la incidencia delictiva ha disminuido en esta administración, pero «urgimos a una política de prevención», en especial en la zona conurbada con el Estado de México.
Delia Ruiz Ovando, diputada de Movimiento Ciudadano, planteó que se requiere más atención hacia los servicios públicos de la ciudad y aseguró que esa fracción no será «un cheque en blanco».
Carlos Candelaria, legislador local del Partido Encuentro Social, planteó que el tejido social en la ciudad está descompuesto y hay desconfianza en el gobierno capitalino, al que se le percibe ineficaz, distante, con el problema de inseguridad de regreso.
Dijo que esa fuerza política promoverá medidas enfocadas a prevención del delito y tendrá con el jefe de Gobierno una relación de respeto, pero nunca sumisa, ya que el compromiso es con la sociedad.
Fuente: Milenio