Armando Ríos Piter acecha el liderazgo perredista; asalta cualquier espacio posible en los medios de comunicación. Hace la tarea.
Para el senador guerrerense acabaron las simulaciones; viene la nueva generación, los tiempos de alianzas y unidad, el olvido de odios y rencores… por ahí va su discurso.
Frente al intenso Fernando Belaunzarán –quien carece de apoyo real– y a Beatriz Mojica –la cara bonita de Los Chuchos para preservar dizque el poder; tercera en discordia– Ríos Piter cree que ganaría de calle.
Pero…
Primero necesita lograr precisamente el apoyo de Nueva Izquierda que tiene en la bolsa al 30% del Consejo Nacional, y de Héctor Bautista, líder de la corriente Alianza Democrática Nacional (ADN) que suma otro 20%. Sin convencer a ambas fuerzas, El Jaguar no ruge ni siquiera como tigre de papel…
Ríos Piter, Belaunzarán y Zoé Robledo no tienen suficientes votos del Consejo Nacional, es más, ni siquiera tienen asiento en ese cónclave, para que me entienda… y sin la decisión de la mayoría quien llegue a la presidencia del partido-repartido estaría de adorno.
En el fondo también está el problema de Ríos Piter por su pelea con Jesús Ortega –¿el Chucho chueco?– a quien exhibió por intentar obligarlo a pactar en lo oscuro con los leales al defenestrado Ángel Aguirre Rivero, cuando Armando aspiraba a competir por la gubernatura de Guerrero. Por eso se “rajó”. Si Ríos Piter tiene buena memoria, Jesús Ortega la tiene más.
Lo bueno es que Armando sí cuenta con el apoyo de Miguel Barbosa –líder perredista en el Senado–, lo malo es que Barbosa ya no cuenta.
A menos que se diera un pacto diabólico, las posibilidades reales de Ríos Piter serían escasas. Si pretende vencer, primero debe convencer desde afuera a los consejeros de adentro… y aún ganado eventualmente el liderazgo tendría que ejercerlo bien amarrado a las “tribus” que ejercen la mayoría: Nueva Izquierda y ADN… si no, pues no.
Si los perredistas no convocan a un órgano colegiado para arreglar su “desmadre”, será imposible ponerlos de acuerdo.
–¿Por qué cree usted que se cayó Carlos Navarrete?
EL MONJE LOCO: Los medios de comunicación nos estamos yendo con la finta del rugido de El Jaguar; no entendemos que no entendemos lo que sí pasa en el PRD. En la cena de negros amarillos, flota la visión esquizofrénica de quienes desean volver al pasado encarnado por López Obrador, Cárdenas y quien se deje seducir por la romántica idea de una reconciliación que amenaza con el suicidio.
