El Nemesio Diez es un fortín. La casa de los Diablos Rojos del Toluca apagó las ilusiones del buen inicio de Pumas en el Apertura 2015. Los dirigidos por José Saturnino Cardozo impusieron ley por 2-1 en su estadio y ya acumulan una racha ganadora en este desde el 26 de octubre del 2014; esta tarde, el Infierno consumió a unos felinos rápidos y verticales, que no les alcanzó para ganar.
EL ENCUENTRO
Con la incorporación de Josecarlos Van Rankin en el once titular, como mayor novedad en su alineación, Pumas inició su segundo encuentro de Liga, ante Toluca en el Nemesio Diez. Guillermo Vázquez decidió excluir a Javier Cortés de su once, para darle minutos y brindarle confianza al lateral, esta vez convertido en volante interior por el costado derecho.
El inicio del encuentro fue trepidante. Ambas escuadras tienen futbolistas rápidos, sobre todo en la zona de ataque y el local no dudó en irse al frente de inmediato; antes del minuto 5 ya había amedrentado la meta defendida por Alejandro Palacios con una seguidilla de disparos que no consiguieron su cometido principal. Todo quedó en avisos, en advertencias.
Poco a poco, Pumas consiguió hacerse del esférico. Se disputaba un encuentro ríspido, con entradas duras; los Diablos, por su parte, aguantaban, se replegaban y con orden táctico se acomodaron en el terreno de juego. Al 17′, encontraron su recompensa: Gerardo Rodríguez, lateral nominal, se intregró al ataque partiendo de su sitio en el campo y por sorpresa apareció en el área auriazul para, con un disparo cruzado, firmar el primer tanto.
El gol lo gritó el Nemesio Diez, lo festejó Saturnino Cardozo desde su zona técnica y lo aplaudió Lucas Lobos, colocado en uno de los palcos del recinto, lesionado y con pocas esperanzas de volver pronto a la cancha, vestido de rojo. La anotación la reclamó airadamente Memo Vázquez a los suyos, que no previnieron a tiempo la llegada de Rodríguez desde atrás.
El descanso llegó con la mínima ventaja de los del Estado de México; Universidad Nacional trató de recomponer y lucía mejor sobre el campo, con mayor idea pero sin la profundidad deseada. Adelante, apenas si Eduardo Herrera, el eje de ataque, pudo tocar el balón unas cuantas ocasiones. El Infierno es un sitio que pesa para cualquier rival.
Para el complemento, apenas al minuto 47, y gracias a una jugada prefabricada a balón detenido, Toluca incrementó su ventaja. En lo que parecía un inofensivo tiro libre en los linderos del área de Alejandro Palacios, terminó en un pase a profundidad que Enrique Triverio transformó en el segundo tanto de la tarde.
Pero Pumas reaccionó, Memo adelantó líneas, fue más ofensivo y su equipo se hizo del balón; el timonel azul y oro le dio acceso a Matías Britos y sacó a David Cabrera, con la intención de aumentar sus variantes en el aparato ofensivo. Las modificaciones se notaron en la forma de juego de la visita y el espectáculo. Era un duelo abierto.
Al 72′, luego de conectar un centro de Javier Cortés con la cabeza, Matías Britos, recién ingresado, acortó las distancias. Los del Pedregal eran superiores y su futbol, vertical, ofensivo. Como en el inicio del duelo, los escarlatas aguantaron, contragolpeaban cuando podían y lo hacían a velocidad, generando peligro a la zaga rival.
Los esfuerzos no fueron suficientes y aunque Pumas mejoró en cuestión de minutos, se llevó de Toluca un duelo de sinsabores y una derrota como resultado; la escuadra de Saturnino Cardozo, en cambio, mostró efectividad y convenció a su tribuna. A los de CU les aguarda una semana de análisis, para luego acudir a Puebla y medirse ante La Franja.