Categorías: En Contexto

La osadía de Hillary Clinton; exigir fin del embargo a Cuba

Publicado por
José Cárdenas

Hillary Clinton fue vehemente en su defensa de una política de acercamiento hacia Cuba y del fin del embargo.

Algunos calificaron de audacia que Hillary Clinton se decidiera a pedir firmemente el fin del embargo estadounidense sobre Cuba precisamente en Miami, una de las ciudades con más presencia del exilio cubano en Estados Unidos.

Sin embargo, la aspirante a la nominación del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales de 2016, no titubeó al exclamar: «El embargo sobre Cuba se tiene que acabar de una vez por todas».

Los asistentes al acto de precampaña de Clinton este viernes en el pequeño auditorio de la Universidad Internacional de Florida (FIU, en inglés) recibieron sus palabras con alborozo.

Más que audacia, se puede decir que Clinton demostró buena capacidad de cálculo al elegir el momento y el lugar donde expresar su posición sobre la isla.

Después del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre EE.UU. y Cuba, ante una audiencia convencida y en un estado, Florida, en el que el voto hispano tiene un peso importante.

Porque no sólo habló de Cuba, sino también de América Latina.

+INFO: Lea también: Los temas pendientes que impiden la normalización de relaciones entre EE.UU. y Cuba

Oportunidad para EE.UU. en América Latina

Clinton considera que el papel jugado por EE.UU. en Cuba ha debilitado la influencia del país en América Latina

Clinton considera que el papel jugado por EE.UU. en Cuba ha debilitado la influencia del país en América Latina.

La precandidata demócrata calificó de lastre la política de su país hacia Cuba y sostuvo que es algo que ha aislado a EE.UU. en la región.

«Demasiado a menudo miramos al este, miramos al oeste, pero no miramos al sur», lamentó la ex secretaria de Estado.

«Ninguna región en el mundo es más importante para nuestra prosperidad y seguridad a largo plazo que América Latina», agregó.

«Y ninguna región del mundo está mejor posicionada para surgir como un nuevo motor para la paz y el progreso mundiales».

En este punto, Clinton aprovechó para criticar a sus oponentes republicanos, de quienes dijo que todavía parecen pensar que América Latina es una tierra de crimen y golpes de Estado.

«Están equivocados. América Latina es hogar de democracias vibrantes, clases medias en expansión, suministros energéticos abundantes y un PIB combinado de más de US$4 billones».

«El poder de la proximidad»

Clinton hizo una emotiva defensa de los valores y el legado común que, en su opinión, unen a toda América y pueden dar lugar a una nueva era de asociación y prosperidad.

Defendió la necesidad de afrontar juntos los desafíos del hemisferio, desde el crimen hasta las drogas y la pobreza.

«Debemos levantarnos para defender nuestros valores compartidos contra regímenes como el de Venezuela. Estados Unidos necesita ser líder en América Latina. Si no lo hacemos nosotros, no se equivoquen, otros lo harán. China está deseosa de expandir su influencia».

Los opositores a que se levante el embargo contra Cuba tildan a Obama de cobarde por su política hacia la isla.

Para Clinton, la «impopular» política estadounidense hacia Cuba ha supuesto un freno a la hora de desarrollar este papel como líder regional.

Rechazo republicano

Una de las claves para continuar el acercamiento hacia Cuba, según la precandidata, es fomentar los viajes de estadounidenses a la la isla.

«Si el Congreso no actúa en este sentido, usaría mi autoridad ejecutiva para facilitar que más estadounidenses puedan viajar a la isla para apoyar empresas privadas y conectar con la gente cubana”.

El discurso de Clinton desató fuertes críticas de sus oponentes republicanos.

Marco Rubio, senador por Florida de origen cubano y candidato a la nominación republicana para las elecciones, calificó de error sus propuestas.

Otro precandidato republicano, Jeb Bush, fue más lejos al señalar que es insultante que Clinton pida el fin del embargo en Miami, ciudad que según dijo «se ha convertido en el hogar y refugio de millares de víctimas de Castro».

El precandidato republicano Jeb Bush coincidió este mismo viernes con Hillary Clinton en un acto anterior en Fort Lauderdale.

El exgobernador de Florida, hijo y hermano de expresidentes de EE.UU., acusó a Clinton de una «retirada en la lucha por la democracia en Cuba a cambio de nada por parte del régimen en La Habana».

+INFO: El histórico «nido de espías» que fue el edificio de la embajada de EE.UU. en Cuba

Reacciones al discurso

Las protestas también se dejaron oír en el propio campus de la FIU, donde aquellos que se oponen a la política de acercamiento entre EE.UU. y Cuba desplegaron sus pancartas y despidieron a Clinton con gritos de rechazo.

«Lo que resulta bochornoso del discurso de la secretaria Clinton es que quiere reconocer que el régimen castrista representa la soberanía del pueblo cubano y no la representa, la tiene secuestrada a través de la violencia, a través de masacres, torturas, encarcelamientos», le dijo a BBC Mundo Ana Carbonell, participante en la protesta.

«Estamos aquí para recordarle al mundo que las sanciones de EE.UU. requieren tres cosas para que se levanten: la libertad de todos los presos políticos, la convocatoria de elecciones libres y que a los opositores en Cuba que son pacíficos no se los golpee en las calles, que puedan reunirse pacíficamente», agregó Carbonell.

«Son medidas razonables y son la esencia de la dignidad humana, y estamos aquí para recordarle a Hillary Clinton que esa es la esencia de la política actual de EE.UU. y que ella debe estar abogando e insistiendo para que el pueblo cubano recupere su derecho a la autodeterminación».

Al término del discurso hubo protestas contra Clinton en el campus de la Universidad Internacional de Florida.

Pero no todo fueron gritos de rechazo.

Lenoarda Durán Buike, presidenta del caucus demócrata-hispano del condado de Miami Dade, aclamó el nombre de Hillary, para indignación de algunos.

«Defiendo a Hillary Clinton porque ella es el futuro, estamos en el siglo XXI», le dijo Durán Buike a BBC Mundo.

«Cincuenta años de política hacia Cuba no funcionaron, ellos necesitan cambiar sus mentes, están atrasados, necesitamos mirar al futuro», agregó.

Y concluyó: «Los cubanos necesitan desarrollo y avances y el único país que puede proveer esto es EE.UU. y Hillary Rodham Clinton como su presidenta».

Fuente: Beatriz Díez / BBC MUNDO

Compartir:
Compartir
Publicado por
José Cárdenas

Entradas recientes