Tres años después de concluir su presidencia en Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva actuó en Cuba como gestor de la constructora brasileña Odebrecht, involucrada en el caso de corrupción de la estatal Petróleo Brasileiro (Petrobras), con el fin de construir una terminal de contenedores en el puerto cubano de Mariel, reportó la revista Época, integrante del consorcio mediático Globo
Con el título “Nuestro hombre en La Habana”, la publicación citó despachos de diplomáticos brasileños sobre las visitas que el ex mandatario hizo a Cuba para promover a Odebrecht y otras empresas de su país, cuando ya había entregado la estafeta a su sucesora y correligionaria en el Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, quien llegó por primera vez al poder en 2011 e inició su segundo mandato en enero pasado.
Lula dijo el viernes en una entrevista por radio que podría postularse nuevamente a la presidencia en 2018 y advirtió: ahora voy a hablar, voy a viajar, voy a dar entrevistas, voy a incomodar
.
El pasado día 16, durante manifestaciones contra el gobierno de Rousseff en varias ciudades de Brasil, aparecieron por primera vez carteles que acusan al ex presidente de complicidad en los dos mayores casos de corrupción en Brasil de los últimos 10 años, el petrolao y el mensalao –la repartición mensual de sobornos a legisladores para que aprobaran proyectos del Poder Ejecutivo– que provocó el encarcelamiento de José Dirceu, ex jefe de gabinete de Lula.
Este domingo, en el centro de Sao Paulo, una organización denominada Movimento Brasil Melhor exigió frente al Tribunal de Cuentas de la Unión investigar actos de Lula, con un enorme muñeco inflable que muestra al ex mandatario vestido de reo. Mil personas asistieron a la movilización.
Desde Londres, la compañía británica Rolls Royce, que ha estado implicada en casos de soborno en China e Indonesia, informó que estácooperando
con la fiscalía brasileña en la investigación del petrolao,formalmente conocido como Operación Lava jato (Lava autos), pero no dio detalles.
Fuente: La Jornada