El suizo señaló que quien lo tache de corrupto debe comprobárselo y aseguró que no hubo nada ilícito durante su gestión en la FIFA.
El presidente de la FIFA, Sepp Blatter, negó hoy ser corrupto y emplazó a quienes le acusan de serlo a demostrarlo, lo que según sus palabras no conseguirán porque tales acusaciones no tienen fundamento.
«Yo les diría: ¿conocen el significado de la palabra que están utilizando? Quien me acuse de corrupto tiene que demostrármelo, en primer lugar. Y eso no lo conseguirá nadie, porque no soy corrupto», afirma Blatter, en declaraciones a la revista alemana «Bunte».
El presidente de la FIFA, quien en pleno escándalo de corrupción se mostró dispuesto a dimitir, dice a esa publicación que parte de la base de que el próximo año no ocupará ya ese cargo, aunque afirma tener la consciencia limpia.
Nadie podrá llevarle «entre rejas», por cuestiones relacionadas con su trabajo en el ámbito del fútbol, añade en tono desafiante.
«Si se dice que yo soy corrupto porque la FIFA lo es no puedo más que sacudir con la cabeza. Los que sostienen estas cosas sin pruebas deberían ser encerrados», añade Blatter, quien dice ser una persona creyente, que reza y que tiene en una cruz de oro que fue bendecida por el papa Francisco.
Fuente: Excélsior