Se impulsa su comercio interno como un desafío para un bloque heterogéneo
La 48 cumbre presidencial del Mercosur, realizada en Brasilia, terminó con varios llamados a la flexibilización de las reglas y a una mayor apertura por parte de los presidentes de Brasil, Uruguay y Paraguay, que abogaron explícitamente por buscar vías para intensificar el comercio.
La unión aduanera adoptará el Plan de Acción presentado por Paraguay y Uruguay -en la cita previa que reunió a los cancilleres- para intentar una vez más limpiar las barreras comerciales que históricamente obstaculizan el intercambio entre los socios.
Hay que eliminar barreras que impiden el comercio”, enfatizó el presidente paraguayo Horacio Cartes, quien recibió la presidencia temporal del bloque de manos de la brasileña Dilma Rousseff.
El Mercosur sigue aún encorsetado por normas paraarancelarias, como la obligación de presentar declaraciones juradas para importar o exportar, o las licencias no automáticas, que en la práctica sirven para administrar el comercio y han afectado su dinámica interna de intercambio.
El programa propuesto por las economías más pequeñas del bloque definirá a fines de 2015 qué medidas arancelarias y no arancelarias serán mantenidas.
La reunión del viernes había llegado precedida de una serie de reclamos públicos por parte de Brasil, Uruguay y Paraguay para revitalizar el comercio del bloque, también golpeado por el enfriamiento de sus mayores economías: Brasil, Argentina y Venezuela.
En su breve intervención, Cartes anunció una presidencia “pragmática” que perseguirá un Mercosur “sin trabas al comercio”, una idea que no fue acompañada con la misma vehemencia por Argentina y Venezuela que tienen modelos económicos más cerrados.
Fuente: El Economista