GABRIEL CASILLAS | Perspectiva Global
En el 2013 se registraron poco más de 583 mil matrimonios en nuestro país, incluyendo matrimonios del mismo sexo en el Distrito Federal y los estados de Jalisco y Chihuahua. De los 583 mil matrimonios, cerca de 71 mil se llevaron a cabo en el Estado de México, ocupando el primer lugar del país y representando el 12 por ciento de todos los matrimonios que se celebraron en México, porcentaje similar al que representa la población de dicho estado (13.5 por ciento). Le siguió Jalisco, con poco menos de 40 mil matrimonios, aportando así el 6.8 por ciento de todos los matrimonios del país, porcentaje cercano al 6.5 que representa la población de dicho estado en nuestro país. Cabe destacar que el estado de Quintana Roo fue el que registró un mayor número de matrimonios registrados con respecto a lo que representa su población. En este sentido, se celebraron cerca de 10,200 matrimonios en el 2013 en dicha entidad, representando casi el 1.8 por ciento de los matrimonios celebrados en México, cuando la población de Quintana Roo sólo representa el 1.2 por ciento de la población de nuestro país. En mi opinión, esto puede ser producto de la combinación de dos factores. Por un lado, la juventud relativa de la población de ese estado a “edad casadera” y por el otro, la tendencia de moda en una parte de la población de otros estados de la república e inclusive de otros países que escoge las paradisiacas playas de Cancún o de la Riviera Maya para llevar a cabo su celebración nupcial. El último lugar lo ocupa el estado de Baja California Sur, con 2,820 matrimonios celebrados en el 2013, representando así menos del 0.5 por ciento de los contratos maritales firmados en el país, porcentaje cercano al que representa su población (0.6 por ciento). En cuanto a la tendencia que ha observado la serie de tiempo de matrimonios en México, de 1990 a la fecha han registrado una tasa de crecimiento promedio -0.4 por ciento anual y de -1.7 por ciento de 2000 a 2013. Es decir, en promedio cada año se han registrado un menor número de celebraciones nupciales que el año anterior y esta tendencia negativa se ha acentuado en este siglo. Cabe resaltar que esto no concuerda con la mediana de la población de nuestro país de 27 años, en donde si casarse fuera el estado civil al cual pertenecer, la tasa debería estar creciendo, no decreciendo. De hecho, de acuerdo al INEGI, la edad promedio a la que se casan los hombres en México es de 29.8 años y las mujeres de 26.9 años. Cabe señalar que es en el estado de Guanajuato en donde los hombres se casan más jóvenes, con 27.2 años de edad en promedio, mientras que las mujeres que contraen nupcias a más temprana edad en promedio, es en Guerrero, con 24.3 años. Estas edades promedio se encuentran todavía por arriba de las de Ecuador, en donde en promedio los hombres cambian de estado civil de soltero a casado a los 25 años y las mujeres hacen lo propio de sólo 21.8 años. En contraste, volviendo a nuestro país, el Distrito Federal tiene el récord más alto de edad promedio a la que se casan los hombres, con 33.2 años, y las mujeres, con 30.4 años. Aun así, no le llega a la edad promedio a la que se casan los hombres y mujeres en Alemania, de 34.1 y 31.7 años, respectivamente.
En cuanto a la disolución del vínculo matrimonial, la tendencia de divorcios en México ha ido creciendo en los últimos 25 años. De hecho, el número de divorcios registrados ha crecido a una tasa anual promedio de 4.3 por ciento de 1990 a 2013 y ésta se ha exacerbado en los últimos años a 5.8 por ciento de 2000 a la fecha. En el 2013 se registraron poco más de 108 mil divorcios en nuestro país, la cifra más alta registrada desde que INEGI publica estadísticas en este rubro. Cabe señalar que el porcentaje de divorcios “judiciales” es de 84 por ciento y el resto (16 por ciento) es de divorcios “administrativos”, en donde han crecido más en promedio los divorcios judiciales (4.6 por ciento), que los administrativos (2.9 por ciento) en promedio de 1990 a la fecha. El Estado de México se lleva el primer lugar en número de divorcios registrados en el 2013 con 18,253, representando casi el 17 por ciento de todos los divorcios registrados de nuestro país, porcentaje superior al 13.5 por ciento que representa la población total de dicho estado con respecto al país. El último lugar lo ocupa Tlaxcala, con 487 divorcios registrados en 2013, es decir, el 0.4 por ciento del total de divorcios del país, un porcentaje significativamente menor al que representa la población de cerca de 1.1 por ciento. Cabe resaltar que la discrepancia más grande entre porcentajes de divorcios y de población se observó en el estado de Coahuila, con poco más de 5,500 divorcios, representando el 5.1 por ciento del total de divorcios del país, cuando la población de Coahuila representa menos del 2.5 por ciento de la del país. En cuanto a la edad a la que los hombres se divorcian en promedio en México, ésta es de 39.5 años y las mujeres de 35.8 años. En Guanajuato es donde tanto hombres como mujeres se divorcian a más temprana edad (37.3 y 35 años, respectivamente), curiosamente una de las entidades en donde se casan más jóvenes, en promedio. Por último, es en el Distrito Federal en donde se divorcian más tardíamente (hombres: 42 años; mujeres: 39.5 años).
Dedico esta columna enviando una felicitación a quienes celebraron su matrimonio recientemente o están por celebrarlo, así como para enviar un mensaje de apoyo a quienes han tenido que pasar el trago amargo de un divorcio.
* El autor es economista en jefe de Grupo Financiero Banorte. Las opiniones que se expresan en el artículo no necesariamente coinciden con las del Grupo Financiero Banorte, por lo que son responsabilidad absoluta del autor.
Twitter: @G_Casillas