A sus 80 años de edad, esta mujer vive en libertad a pesar de que fue acusada por secuestro, trata de personas y delincuencia organizada
Rosa del Carmen Verduzco Verduzco, mejor conocida como Mamá Rosa, nunca se resignó a perder su reino.
Diversas denuncias públicas de miembros de organizaciones civiles, señalan que la exfundadora y directora del albergue La Gran Familia, de nueva cuenta ha comenzado a recibir a niños y adultos en sus domicilios particulares de los municipios de Zamora y Tangancicuaro.
María Ampudia, presidenta de la ONG ¿Y quién habla por ellos? y Juan Bosco Martínez Mejía, presidente de la Fundación del Instituto de Medicina Avanzada y Humanidades (IMAH), señalaron que tienen indicios de que Mamá Rosa, sigue recibiendo a personas e incluso, continúa registrando a niños con sus apellidos.
“Tenemos conocimiento de que hay nuevas casas albergue de Mamá Rosa. Que tiene metidas nuevamente a niños y adultos en algunas de sus casas antiguas en esta ciudad. No se trata de albergues. Están en sus casas de mamá rosa, obviamente sin regulación y muy discretamente», señaló Martínez Mejía, en entrevista con CNNMéxico.
“Sabemos también que ahí hay tres niñas menores de edad que están embarazadas. La gente ha venido a denunciarlo con nosotros”.
Incluso, Ampudia y Martínez Mejía hace un mes expusieron públicamente los casos de las tres jóvenes embarazadas en las nuevas casas-albergue de Mamá Rosa durante un foro de Justicia y Derechos de la Infancia que se llevó a cabo en Zamora.
“Mamá Rosa goza de cabal salud, no está loca y quiere, ante las narices de todo mundo, regresar por sus fueros para comenzar de nuevo”, acusa el presidente de la Fundación IMAH.
Fuente: CNN
1 comentario
Es lamentable que no se le aplique el peso de la ley a esta mujer. Soy ciudadano de Zamora y un día pude ver en la calle a la señora Rosa Verduzco, conduciendo una camioneta muy lujosa (seguramente de su propiedad), ¿pues no que ya estaba senil? Además fue en un crucero en las calles del centro de la ciudad, donde se supone la regla de tránsito es el clásico «uno x uno», era mi turno de avanzar y esta vieja decrépita aceleró su vehículo y me impidió avanzar en el crucero cuando no le correspondía… así se las gasta la señora y eso que ya está según muy enferma e incapacitada…